El Barça ya pendía de un hilo, con bajas muy importantes. Sin Araujo, Frenkie de Jong y Gavi, el Barça es menos Barça. Ahora, sin Ter Stegen, todo se tambalea. La experiencia de la pasada temporada es preocupante. Las titularidades de Iñaki Peña coincidieron con el hundimiento del equipo de Xavi Hernández en la Liga.
Iñaki Peña fue el relevo de Ter Stegen cuando el portero alemán se operó de sus problemas lumbares. El futbolista alicantino disputó 17 partidos con el Barça en los que recibió 32 goles. Es decir, 1,8 tantos por encuentro. En la Liga encajó 17 goles en 10 partidos.
Los problemas de Ter Stegen
En verano, el Barça ni tan siquiera se planteó de fichar a un portero con mucha experiencia en la elite. Y eso que el rendimiento de Ter Stegen bajó mucho la pasada temporada. Tres días antes de lesionarse en Villarreal, el alemán falló en el primer gol del Mónaco, en una acción que terminó con la expulsión de Éric García.
El Barça, en seis partidos de Liga y en uno de la Champions, solo ha dejado su portería a cero en un partido. El día del Valladolid (7-0). En Villarreal, Iñaki Peña no recibió ningún gol, pero vio cómo la pelota se estrellaba en el travesaño.
Las otras opciones
Hansi Flick, siempre pragmático, dará continuidad a Iñaki Peña. También cuenta con Astralaga y Kochen, muy jóvenes y con un gran futuro, pero Deco ya sondea el mercado para fichar a un guardameta en el mercado de invierno.
En el Barça gustan dos porteros. Uno es muy conocido, Jordi Masip, sin contrato tras agotar su contrato con el Valladolid. Está en un gran momento de forma. El otro portero que tiene opciones de llegar al equipo azulgrana es Álvaro Vallés, de la UD Las Palmas, que acaba contrato el próximo 30 de junio. Actualmente no juega por su negativa a renovar su contrato. Sus características se adaptan bien a las exigencias del Barça por su buen dominio del balón con los pies, más allá de ser solvente en el uno contra uno.