El Barça, autoritario en la Liga, se estrelló en la Champions. Una vez más. Un error de Ter Stegen fue el primer gran golpe para un equipo en construcción, vencido finalmente por un despiste de Iñigo Martínez que aprovechó Ilenikhena para fusilar al portero alemán.
Iñigo Martínez (33 años) lo ha jugado todo. Es una pieza básica para Hansi Flick por las lesiones de Ronald Araujo y Andres Christensen. Futbolista experto y con carácter, suele ser fiable. Es más solvente que brillante.
Los problemas en Europa
En verano, Flick pidió a Deco que inscribiera lo antes posible a Iñigo Martínez para que pudiera jugar en Valencia. Ejerce de líder en la defensa, pero es un futbolista algo lento. O, como mínimo, un futbolista que sufre cuando el Barça concede tantos metros.
En un partido de máxima tensión, muy táctico, dudó Iñigo Martínez en el segundo gol del Mónaco. No es la primera vez que sufre en Europa ante delanteros muy físicos o rápidos. Y falta por ver si Flick seguirá dándole carrete cuando recupere a Araujo y Christensen.