El FC Barcelona presume de La Masia. De su fútbol formativo. En tiempos de crisis económica, la cantera siempre es la mejor solución. Futbolistas con calidad siempre los ha habido, pero el salto al primer equipo casi nunca ha sido fácil. Ahora, afortunadamente, el Barça cuenta con jugadores con mucho talento y descaro, como Lamine Yamal, Pau Cubarsí, Héctor Fort, Marc Bernal y Marc Casadó, entre otros. Y, sin hacer mucho ruido, aparece un futbolista que va para crack.
Noah Darvich, futbolista alemán de 17 años, fue un fichaje estratégico del Barça, el pasado verano. El club azulgrana pagó 2,5 millones al Friburgo por un jugador con mucha clase. Por un centrocampista exquisito que es un diamante todavía por pulir.
Los números con el Barça B
El Barça no tiene prisa con Darvich. Al contrario. Nadie quiere quemarlo en el club. Ni, hace un año, Rafa Márquez, su entrenador en el filial, ni Hansi Fllick, ahora técnico del primer equipo.
Darvich necesitó un tiempo para adaptarse al Barça y a Barcelona. Comenzó en el Juvenil y, poco a poco, entró en los planes de Márquez. Con el Barça B disputó 21 partidos en los que marcó un gol y dio dos asistencias. No fue una pieza básica para el técnico mexicano, pero sí exhibió destellos de gran clase.
El stage de Estados Unidos
Flick, en la actual pretemporada, citó a Darvich para el stage de Estados Unidos. Cuenta con él. De momento, el centrocampista alemán ha participado en los dos partidos contra el Manchester City y el Real Madrid.
Darvich encaja perfectamente en el 4-2-3-1 de Flick. Rinde mejor como mediapunta, por detrás del delantero centro, gracias a su capacidad para filtrar pases. Inicialmente, jugará toda la temporada en el Barça B, aunque podría tener alguna oportunidad en el primer equipo en caso de necesidad.