El Girona es la gran sensación de la Liga. Y no lo es por casualidad, ni solo por ser un equipo satélite del Manchester City. Quique Cárcel, el director deportivo, conoce perfectamente el mercado y ha sabido armar una buena plantilla para Míchel Sánchez. Savinho y Aleix García son, posiblemente, las grandes referencias del Girona, pero a Deco, director de fútbol del Barça, le gustan más futbolistas.
El Barça busca extremo izquierdo. No tiene un delantero que aporte profundidad por la banda izquierda. Joao Félix se mueve muy bien entre líneas y arrancando desde la izquierda, pero con tendencia a ir hacia el centro. Y el jugador que más seduce a Deco es Savinho.
Savinho es un extremo brasileño de 19 años que se ha convertido en la gran revelación de la Liga. Ha participado en 15 partidos de Liga en los que ha marcado cuatro goles y ha dado cuatro asistencias, y su actual valor de mercado, según Transfermarkt, es de 20 millones de euros.
Savinho y Aleix García
El Girona logró la cesión de Savinho, procedente del ESTAC Troyes, otro club satélite del Manchester City. A Deco le gusta su velocidad y su pegada. Considera que es un extremo que podría encajar muy bien en el Barça.
Deco también sigue de cerca a Aleix García, quien ya ha proclamado que le gustaría jugar en el Barça. El centrocampista de Ulldecona ha jugado los 15 partidos de Liga con un balance de tres goles y cuatro asistencias.
Aleix García ha asumido el mando de Girona. Es la pieza clave para Míchel. Su actual valor de mercado, según Transfermarkt, es de 10 millones de euros y tiene contrato con el club rojiblanco hasta el 30 de junio de 2026.
Los cedidos
El Barça también tiene controlado a a los ucranianos Tzygankov y Dovbyk, que están jugando a un gran nivel y tienen mucho futuro, aunque el Manchester City también sigue sus evoluciones.
Deco, paralelamente, está pendiente de Éric García y Pablo Torre, dos futbolistas cedidos esta temporada por el Barça. El defensa ha encajado muy bien en el Girona, mientras que el centrocampista cántabro es un actor muy secundario y en el Barça lamentan que no progrese adecuadamente.