Victoria importante del Barça de Xavi en Montjuïc (5-0). Siempre es importante ganar después de un parón de selecciones, y pese a las bajas de Pedri y Araujo --además de las molestias recientes de Gundogan--, Xavi Hernández colocó sobre el césped del Olímpic un 4-3-3 con protagonismo ofensivo de Joao Félix, Ferran Torres y Lewandowski. Joao Cancelo fue también titular en la nueva defensa de gala del Barça, a la espera de que el capitán charrúa se recupere. Tras una primera mitad en la que los culés dominaron y Joao Félix deshizo la igualdad, llegó minutos después la diana de Lewandowski para asegurar el triunfo. En el segundo acto, Ferran Torres Raphinha y Cancelo pusieron la guinda con tres golazos más. Tres puntos para un Barça que, con 13 de 15, mete presión al Real Madrid en lo más alto de la tabla.
Joao Félix se estrena con golazo
Empezó a buen ritmo el conjunto blaugrana, con Cancelo ejerciendo de centrocampista en la subida de balón y con llegada al área contraria, al más puro estilo Dani Alves. Joao Félix se fue también hacia el centro partiendo desde la banda izquierda, mientras que Gavi se convirtió en el puente entre delantera y medio campo, con Frenkie y Oriol Romeu en la zona de pivote. El Barça controló la posesión y se acercó peligrosamente al área de Rui Silva en los primeros minutos, a excepción de un contragolpe en el que Luiz Henrique metió el miedo en el cuerpo al Olímpic.
Fue una oportunidad aislada en la primera media hora. Porque corría el minuto 25 cuando Joao Félix, casi sin ángulo, marcó el primer gol del partido. Fue merced a un robo de su compatriota Cancelo, que acabó con un gran centro de Oriol Romeu para que el nuevo dorsal 14 del Barça, tras un remate fallido y regatear al portero, lograse el botín de su primera diana con la camiseta azulgrana.
Lewandowski amplía las diferencias
Un tanto merecido para los de Xavi, que desde el primer momento plantearon un partido muy serio. No tardaron, de hecho, en marcar el segundo. Esta vez obra de Lewandowski con una asistencia sin tocar el esférico de Joao Félix. El balón acabó en las botas de un delantero, el polaco, que parece haber encontrado la finura y ya acumula tres dianas en esta Liga. Pase en profundidad de Christensen, túnel intencionado de Joao Félix y definición perfecta para un Lewandowski que olvida así las penurias con su selección.
El FC Barcelona levantó el pie del acelerador en los últimos minutos del primer tiempo, y eso lo aprovechó el Betis para acercarse peligrosamente a la portería azulgrana. Willian José envió un remate a las nubes cuando ya olía el gol, y en un mano a mano posterior Ter Stegen colocó una mano milagrosa para evitar la diana de Ayoze. Antes del descanso, Rui Silva protagonizó otro paradón en el área contraria, esta vez ante el disparo de un Joao Félix que podría haberse marchado con doblete de goles al túnel de vestuarios.
Ferran Torres emula al mismísimo Messi
El Barça empezó el segundo acto con la misma intensidad que el primero. Apenas dos minutos tardó en disparar a la puerta del portero del filial Betis, tras la sustitución de Rui Silva por lesión en el aductor. El tiro de Ferran Torres, el único del tridente que quedaba sin marcar, se marchó demasiado alto. Unos minutos después, fue Joao Félix quien volvió a situar el balón en el fondo de las mallas, aunque en fuera de juego previo.
No pasaba nada, porque aún quedaban varios goles por caer en el bando culé. Ferran Torres puso el tercero con un gol de falta directa, con un disparo con rosca que demostró que el guardameta rival no había situado bien la barrera. Primer gol de falta directa del Barça, por cierto, desde que Leo Messi no forma parte de la plantilla.
Raphinha y Cancelo cierran la goleada entre 'olés'
El Estadi Olímpic empezó a hacer la ola a la hora de partido, y no era para menos. El Barça goleaba, y jugaba a las mil maravillas pese a la salida de Joao Félix, Ferran y Romeu para que entrasen Lamine Yamal, Gundogan y Raphinha. Este último, de hecho, fue el encargado de anotar el cuarto gol del encuentro. Un golazo desde fuera del área, al aprovechar el brasileño una de sus mejores cualidades: el disparo desde larga distancia. En mitad de los olés del Estadi, Raphinha se reivindicó. Igual que todo un Barça que, por momentos, recordó con su buen juego al de la era Guardiola.
Pero faltaba uno más por apuntarse a la fiesta: Joao Cancelo. En una gran jugada colectiva que el lateral derecho resolvió a las mil maravillas --con recorte incluido, como si fuera un extremo--, se sacó de la chistera un potente disparo cruzado que batió al novato portero del Betis. 5-0, manita y a descansar para el martes, que empieza la Champions League. Hay motivos para la ilusión, de eso no hay duda.