El Barça debe reaccionar

En noviembre todo es muy relativo, pero el Barça de Hansi Flick de esta temporada empieza a necesitar una reacción para alejar cualquier tipo de fantasmas, y también las dudas que está dejando el equipo en las últimas fechas.

Evidentemente, la plaga de lesiones que sufre la plantilla blaugrana está afectando y mucho al equipo, pero también hay que ser autocríticos y exigentes, para ver que los blaugranas no deberían haber sufrido tanto con Girona, Elche y, mucho menos, haber sacado un empate ante el Brujas belga en la Champions.

En este primer tramo de temporada no se puede ganar ningún título, pero sí que se pueden perder, aunque sería un escenario muy complicado, pero los de Flick no deben quedar rezagados del Real Madrid de Xabi Alonso en la Liga, ni tampoco lejos del objetivo de entrar entre los ocho primeros de la Champions.

El objetivo ahora es ganar, sea como sea, aunque lo ideal es vencer y convencer, a la espera de ir recuperando titulares importantes y que estos vayan acumulando minutos de calidad, para entonces, recuperar las sensaciones de equipo dispuesto a grandes cosas que teníamos la pasada temporada.

Es importante que, aunque la situación de la enfermería sea complicada, el equipo empiece a dar síntomas de reacción para mantener a la afición enganchada y sin que exista ningún atisbo de duda hacia el proyecto de Flick, un entrenador que puede ocupar el banquillo blaugrana varias temporadas, siempre que el entorno sea el adecuado, lejos de la información aparecida esta temporada en algunos medios de comunicación.

Antes de un nuevo e inoportuno parón de selecciones, el Barça está obligado a vencer y convencer ante el Celta para alejar fantasmas, mantenerse a flote ante las adversidades y con todas las opciones intactas, y rezando para no sufrir ningún tipo de virus FIFA, aunque Luis De La Fuente ya se haya encargado personalmente de mantener el barcelonismo con el corazón en un puño convocando a un tocado Lamine Yamal, que seguro que obligará a jugar como esté en los intrascendentes partidos de su equipo.

Al margen de la Liga y la situación de la enfermería, donde resulta muy dolorosa la baja del timón del equipo como es Pedri, este Barça debe tener muy claro que, tal y como está el calendario, quedar entre los ocho primeros en la Champions es mucho más que una posición o una clasificación, es evitar un doble partido, lo que conlleva nervios, desplazamiento y minutos de juego, a una plantilla que en ese momento agradecerá dos semanas limpias. 

Evidentemente que el equipo está capacitado para ganar todos los partidos hasta el final de la fase de liga de la Champions, incluida la visita a Stamford Bridge, pues ya ha demostrado que pueda ganar a todos y ante todos, por lo que debe tener muy claro cuál es el objetivo y que, si quieren convertirse en un equipo legendario, la Champions es el único camino y el gran objetivo.

La Liga es el título más importante del curso, y aunque queden muchas jornadas, siempre es mucho más difícil ser campeón por segunda vez que no la primera, porque justamente es lo que separa los grandes equipos de los campeones eventuales, y tanto este equipo como Flick lo saben, por lo que la confianza debe mantenerse intacta.

A fin de que todo siga su curso, vencer y convencer antes del parón se ha convertido en una necesidad, hasta el punto que ganar es incluso más importante que recuperar sensaciones de juego, aunque una reacción en todos los sentidos serviría para volver a dejar muy claro que este equipo no se ha ido, que sigue comprometido y con el talento y las ganas intactas.

Que nadie se baje de este barco, queda mucho y la reacción no se hará esperar; pero por si quedara alguna duda solo hay que recordar que desestabilizar es justamente lo que quieren desde el conjunto blanco, y solo por eso, es lo que no les debemos dar, aunque lo intenten por todos los medios que tienen que no son pocos.

Vencer y convencer, que este Barça sigue muy vivo y con los objetivos intactos.