Cuando el capítulo de llegadas para el Barça 2025-2026 parecía completado y que no tendríamos un verano complicado en este sentido, el conjunto blaugrana ha vuelto a demostrar como es para protagonizar ciertas polémicas ajenas al aspecto deportivo que hace que los culers pensemos por qué siempre le toca al Barça.
En pocos días el conjunto que preside Joan Laporta ha comunicado que finalmente no podrá realizar el trofeo Joan Gamper en el Spotify Camp Nou, en lo que debía ser la prueba piloto para el regreso al Estadi y ha protagonizado un hecho inédito, suspendiendo el primer partido de la gira asiática, no viajando el día que estaba previsto a Japón.
El club manifestó que existía un incumplimiento grave por parte del promotor que dejaba sin el partido que debía enfrentar al Barça con el Vissel Kobe, información a la que se sucedieron diferentes comunicados y filtraciones, sobre si finalmente el partido se realizaría y si el conjunto de Flick iba a viajar finalmente el mismo jueves como estaba previsto, algo que no sucedió, dejando totalmente en el aire lo que se iba a hacer finalmente.
Evidentemente que el Barça no tiene responsabilidad en que un promotor incumpla supuestamente un contrato firmado, pero parece que estas cosas siempre le pasen al Barça y no a otros y mantienen esta sensación de improvisación constante.
Las giras son una fuente de ingresos para los grandes clubes, aparte de que sirven para abrir mercado en otros países, donde existe una pasión por el Barça y que a nivel de marketing son muy importante para el club, por lo que no viajar a Japón no era una buena idea en este aspecto, aunque a nivel deportivo podía serlo.
Esta sensación de improvisación no es positiva, más cuando se sucedían las informaciones sobre lo que iba a hacer o no el Barça sobre el viaje, algo que no sólo ha ocurrido en este tema, sino también respecto a los fichajes, las inscripciones de jugadores o la vuelta al Camp Nou.
Un club tan grande como el Barça y tan complicado necesita estabilidad, tranquilidad y silencio, para operar como debería y hacer lo que está previsto, ya que cada movimiento está muy trabajado y calculado, por lo que se debe trabajar para evitar esta multitud de filtraciones y cambios de criterio que no favorecen al club.
La imagen del club está en juego cada vez que ocurren situaciones como estas, donde seguramente no se habrá recibido nada bien en Japón la decisión del Barça, aunque no haya sido su culpa y esté en su derecho porque se está defendiendo al club, pero que existe una masa de fan importantes que están a la espera de la llegada de sus ídolos y que lo viven con preocupación, por no hablar de los periodistas, que muchos se enteraron de lo sucedido viajando hacia Japón.
El ruido nunca es buen aliado, por lo que el club haría bien en reducirlo a la máxima expresión igual que haría bien el propio entorno de evitar radiografiar cada movimiento y cada pensamiento de la dirección del club.
La gira del club ya se ha solucionado y el equipo está en Japón, por lo que el debate volverá a ser si estos partidos de pretemporadas con tantos actos y quilómetros son buenos para el equipo de Hansi Flick, y aunque lo primero siempre sea defender los intereses del Barça también sería importante mantener la credibilidad de aquello que ya está anunciado de forma oficial.
Hoy es la gira, ayer la vuelta al Camp Nou, y posiblemente en unos días el tema de las inscripciones de los jugadores y el fair play, pero siempre existen cuestiones ajenas que perjudican al Barça y tienen a su masa social muy cansada.
Porque habrá que admitir que sí, hay cosas que sólo le pasan al Barça, y sinceramente cansan, aunque sea por el defender el club. Tomemos nota y sigamos mejorando.