El vestuario del Barça, contra los que ponen en duda su unidad

Plantilla contra directiva en el FC Barcelona. El presidente Josep María Bartomeu notificó a los jugadores la intención de llevar a cabo una reducción salarial en forma de redistribución, tanto a los futbolistas como a los empleados. La intención del club es ahorrarse cerca del 30% de los gastos con esta medida. 

Sin embargo, el vestuario no confía en la actual junta azulgrana, y es por eso que su intención es negociar con la entidad este descenso de salarios en una mesa de negociación propia. Su situación laboral es completamente distinta a los trabajadores, motivo por el cual quieren pactar de forma unilateral. Una opción que, de momento, ha rechazado la cúpula del Barça.

Bartomeu y Grau saludando a Ter Stegen / FC Barcelona

Bartomeu y Grau saludando a Ter Stegen / FC Barcelona

Hay tensión entre ambas partes. Toda la plantilla del cuadro catalán dio el visto bueno al burofax con el que mostraban su rechazo a la mesa de negociación. Pero no porque no estén dispuestos a acceder a la rebaja salarial, sino porque creen que deben negociarla de forma independiente, y con otro interlocutor que no sea Bartomeu. 

El vestuario está unido

A los jugadores del Barça no les ha gustado que se les acusara de no queder ayudar al club en estos momentos tan complicados. Igual que les ha molestado especialmente que se filtrasen nombres que podrían no haber firmado el burofax, en lo que consideran que fue un claro intento de distorsionar la unidad del vestuario en torno a este tema. 

La realidad es que los jugadores del FC Barcelona entienden esta rebaja salarial, pero quieren negociar cada caso de forma individual. La intención de Bartomeu es aplicar una adecuación salarial transitoria, que consiste en pagar parte de la ficha del jugador cuando el club recupere su nivel habitual de ingresos en el futuro. 

Los jugadores del Barça, en un entrenamiento | FCB

Los jugadores del Barça, en un entrenamiento | FCB

Una opción que convence a muchos pesos pesados de la plantilla azulgrana, y que ya se ha llevado a cabo con algunos futbolistas. Por ejemplo, en los contratos de los nuevos fichajes, como Pedri, Pjanic o Trincao, esta medida ya está pactada. Igual que con las más que posibles renovaciones de Ter Stegen, Lenglet y De Jong, los tres nombres que precisamente se filtraron en la negativa a firmar el burofax. 

El vestuario culé está unido en este tema, y consideran que necesitan una mesa de negociación especial. Es la única reclamación de unos futbolistas que estiman que su situación laboral es distinta a los trabajadores, y esperan que el club actúe en consecuencia, con negociaciones individuales. Incluso están dispuestos a ceder para que los propios empleados no sufran esta rebaja. Pero siempre desde sus condiciones.