La última decisión de Bartomeu: el Barça entra en la Superliga de Clubes
El ya expresidente culé comunicó en su despedida el OK del club al nuevo proyecto, que deberá ratificar la Asamblea
28 octubre, 2020 00:58Josep María Bartomeu ya no es presidente del FC Barcelona. Tanto él como su junta directiva presentaron la dimisión, tras no llegar a un acuerdo con la Generalitat de Catalunya para posponer la votación del voto de censura para así asegurar la presencia de diferentes sedes en todo el territorio. El tiempo se le echó encima a la cúpula culé, ya que si no comunicaban su decisión este martes, podrían ser denunciados al incumplir los Estatutos por los socios.
El ya expresidente quiso poner fin a su mandato de más de seis años con un discurso donde repasó todos los éxitos de la actual directiva, y no dudó en atacar al gobierno catalán por irresponsable. Una despedida que guardó también un secreto oculto. Y es que en medio de su alegato, sorprendió a todo el barcelonismo al anunciar que se aprobaron los requerimientos para que el Barça forme parte de una Superliga Europea.
Bartomeu llega en coche al Camp Nou antes de anunciar su dimisión / EFE
"La decisión de jugar la competición deberá ser ratificada por la próxima Asamblea (de compromisarios). Podemos decir con orgullo que somos el mejor club del mundo en valor. Lo hemos conseguido por delante de grandes magnates y estados, manteniendo el club en manos de los socios. La Superliga europea de clubes garantizará sostenibilidad al club y que siga siendo de los socios. Nuestra singularidad hace que no tengamos que repartir dividendos", explicó. Asimismo, Bartomeu anunció también que "el club ha aceptado el nuevo formato del Mundial de Clubes" propuesto por la FIFA, con la participación de 24 equipos y ocho clubes europeos.
¿Qué es la Superliga Europea?
Todo su origen se remonta a finales del siglo pasado en los despachos de los equipos más importantes del Viejo Continente. Y la consecuente creación de la ECA (Asociación de Clubes Europeos), ya en 2008 por parte del propio G-14, el grupo de clubes de fútbol más poderosos de Europa, tanto deportiva como económicamente.
Formado por 14 equipos originarios (FC Barcelona, Real Madrid, Juventus, AC Milán, Inter, Liverpool, Manchester United, Bayern de Múnich, Borussia Dortmund, Olympique de Marsella, PSG, Ajax, PSV Eindhoven y Oporto) y varios adheridos posteriormente (Arsenal, Bayer Leverkusen, Olympique de Lyon y Valencia CF). Los mismos que poco a poco han ido dando forma a un boceto de Superliga Europea donde solo participarían los grandes clubes de Europa.
Se trata de una competición que tiene marcado el 2021 como fecha de puesta en marcha. Una “Liga de las ligas”, pensada para enfrentar a los 20 más grandes de Europa, y que no contaría necesariamente con el apoyo de la UEFA. Por tanto, una liga cerrada donde la gran mayoría de clubes tendrían su plaza asegurada, y se irían sumando otros clubes que entrarían o saldrían en función de su clasificación. Mientras los encuentros acabarían disputándose seguramente entre semana, a lo largo de una temporada que abarcaría de agosto a mayo.
Tebas explota contra Bartomeu
El principal inconveniente de estas Superliga es que afectaría muy negativamente a las ligas domésticas de cada país. Por eso, Javier Tebas, presidente de la Liga, no tardó en explotar contra Bartomeu y el Barça, el primer gran club que ha hecho pública su intención de formar parte de esta nueva competición.
"Desafortunado Bartomeu, anunciando el último día la participación en una competición fantasma, que sería la ruina para el Barça y ratifica su ignorancia en la industria del futbol. Triste final de un presidente que tuvo aciertos y, últimamente, errores", escribió Tebas en su cuenta de Twitter.
Bartomeu, junto a Javier Tebas en el palco del Camp Nou | EFE
La creación de esta Superliga pondría fin al fútbol tal y como lo conocemos. Comportaría una brecha financiera todavía mayor entre pequeños y grandes clubes. Aumentando deudas e incumpliendo todo el fair play financiero. Y creando un monopolio sobre el mercado de fichajes, sin límites para contratar a los mejores jugadores devaluando de esta forma a las ligas nacionales. Por eso, todas las grandes Ligas y la UEFA se han posicionado claramente en contra.