Mucha política y poco fútbol en el Catalunya-Palestina: el partido más reivindicativo en Montjuïc

El Estadi Lluís Companys se vistió de gala para recibir a las selecciones de fútbol de Palestina y Catalunya (2-1). Ambos combinados se enfrentaron en el césped, pero la verdadera lucha no sucedió en el verde, sino en las gradas. Montjuïc se convirtió en un caldero de emociones y quejas por parte de aquellos que reivindican el carácter del conflico abierto entre Israel y Palestina como un genocidio. Mucha política y poco fútbol.

Más pancartas que pelotas

El pistoletazo de salida del encuentro fue un gran espejo de lo que estaba por venir. Ambos conjuntos saltaron al campo de la mano de niños refugiados palestinos y fueron avanzando lentamente hasta llegar al círculo central. Allí, al lado de una gran pancarta con el lema 'Football for Peace' -- 'Fútbol para la Paz'--, sonaros los himnos de las dos selecciones y Montjuïc aplaudió sin cesar tras el final de la música.

Además, en el Gol Sur y el Gol Norte, se alzaron dos 'castells' en los que las 'anxenetes' terminaron por hizar dos banderas: una de Catalunya y otra de Palestina. Entre aplausos y vítores, los aficionados en la grada no dudaron en mostrar sus pancartas con el lema 'Free Palestine' y, evidentemente, se vieron muchas 'estelades'.

Un Montjuïc entregado

La fiesta reivindicativa no cesó tras el pitido inicial, que tuvo que esperar a ser realizado por la celebración de un minuto de silencio por la víctimas del conflicto entre Israel y Palestina. La grada opacó totalmente lo sucedido encima del césped de Montjuïc. Lo 30.018 aficionados que acudieron al Estadi Lluís Companys se hicieron escuchar y, algunos de ellos, aprovecharon el minuto 17 para lanzar los ya tradicionales gritos a favor de la independencia de Catalunya.

Asimismo, el apogeo reivindicativo tuvo lugar después del pitido final del encuentro. Instados por los animadores y speakers del Estadi Lluís Companys, los aficionados despidieron a  los jugadores de ambas selecciones del campo con gritos de "Palestina Llibertat". Los futbolistas terminaron de dar una vuelta de honor por todo el césped y, posteriormente, se procedió a la entrega del trofeo.