Laporta, Rafa Yuste, Sala Martín y Joan Oliver serán investigados por otra estafa vinculada al Reus

Joan Laporta no puede tomarse ningún respiro. En una semana de celebración por la vuelta al Spotify Camp Nou, el actual presidente del FC Barcelona acaba de recibir una muy mala noticia. Laporta ha sido finalmente querellado por una supuesta estafa. La Audiencia de Barcelona ha revocado la inadmisión de una querella en contra de las sociedades CORE STORE, SL, CSSB Limited, Javier Sala Martín, Rafael Yuste y Abel, Joan Oliver Fontanet y, evidentemente, Laporta, por su vinculación a un proyecto del ya desaparecido Reus Deportiu.

Revés monumental para Laporta

La noticia explotó este martes tras las informaciones publicadas por El Triangle, que señala que M.T.A.P. habría ganado su ardua lucha con la Audiencia de Barcelona, después de que el Juzgado de Instrucción 22 de Barcelona rechazara su querella. Alibau invirtió una gran suma de dinero --se comenta una cifra cercana a los 120.000 euros-- en el proyecto que impulsó Joan Laporta y los recientemente mencionados para reflotar el Reus Deportiu en China. Tan solo recuperó 20.000.

Sea por 'A' o por 'B', la iniciativa no dio sus frutos y tras el fiasco, M.T.A.P. decidió acusar a CORE STORE, SL y CSSB Limited por estafa, ya que consideraba que no recibió información veraz ni suficiente sobre los riesgos, y que se le vendió la operación como algo seguro y rentable. En ese entonces, la Audiencia de Barcelona rechazó su petición tras no ver indicios de delito, pero Alibau no se quedó con los brazos cruzados: presentó un recurso de apelación.

La Audiencia rectifica

Ahora, dicho recurso ha llegado a buen puerto. La Audiencia ha revocado la inadmisión de la querella, ya que en esta ocasión, sí que ha identificado indicios razonables de la comisión de un delito de estafa.

Estas sospechas pasan por diferentes factores. Entre ellos están la falta de información veraz y suficiente sobre las inversiones, el engaño en lo que se refiere a la seguridad y rentabilidad de éstas, la instrumentalización de las inversiones mediante sociedades con graves problemas financieros y el uso del prestigio y reputación de los querellados para captar capital. Este último indicio es el que salpica más de frente a Joan Laporta, que según M.T.A.P., ha utilizado su estatus social y mediático para incurrir a la inversión en la iniciativa.

En las manos de la jueza instructora

Dichos argumentos son los que ha llevado a la Audiencia Provincial de Barcelona a ordenar la admisión a trámite de la querella y enviar la pelota al tejado de la jueza instructora, que será quién deberá concretar la práctica de las diligencias necesarias. Es decir, el caso avanza, y ni Joan Laporta --que ya declaró en calidad de investigado recientemente por otra acusación de estafa diferente, pero enmarcada en el mismo caso-- ni ninguno de los acusados puede hacer nada para impedirlo.