El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, en un fotomontaje MONTAJE CULEMANIA
La junta de Laporta acumula unas pérdidas de 140 millones de euros desde que tomó la presidencia en 2021
El club azulgrana vuelve a registrar un resultado global negativo por segundo ejercicio consecutivo, tras incluir gastos extraordinarios e impuestos
Más información: Laporta cierra su quinto ejercicio como presidente del Barça con 2 millones de beneficios ordinarios pero 17 millones de pérdidas
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El FC Barcelona vuelve a las andadas en los despachos. El club azulgrana cierra el ejercicio económico 2024-25 con dos millones de beneficios operativos. Ahora bien, tras incluir los gastos extraordinarios en la ecuación, la entidad dirigida por Joan Laporta ha anotado 17 millones de pérdidas. Por segundo curso consecutivo, la junta directiva ha incurrido en un resultado neto negativo. El presidente del Barça no desaprovecha cada oportunidad pública de reivindicar la recuperación financiera de la institución.
Sin embargo, los números reflejan una realidad menos idílica. El retraso en las obras del nuevo Camp Nou ha impedido enderezar el transatlántico barcelonista. Ni siquiera en cinco años Laporta ha conseguido estabilizar la nave. En cinco cierres económicos desde que el abogado catalán regresó a la presidencia en 2021, se han acumulado 140 millones de pérdidas. De los cinco ejercicios, tres se han sellado en negativo. En los balances de 2022 y 2023, la venta de patrimonio del club por valor de 867 millones evitó el déficit, pero comprometió ingresos futuros.
¿950 millones de ingresos?
No han trascendido los desencadenantes de las pérdidas en el ejercicio 24-25, aunque el club apunta al gasto extraordinario: "Una vez deducidos los extraordinarios, el resultado final después de impuestos es de -17 millones de euros". Aunque no se mojó sobre el cumplimiento de los beneficios en el período fiscal, Laporta aseguró en una entrevista en mayo de 2025 que se imputarían 950 millones de ingresos, es decir, 57 millones más que la cantidad prevista.
El incremento en la facturación proviene, eminentemente, de la cesión de los derechos de explotación pertenecientes a 475 asientos Vip del nuevo Camp Nou por 30 años. La operación sellada a cambio de 100 millones a finales de 2024 se estructuró en 30 millones abonados por la compañía Forta Advisors y otros 28 por New Era Visionary Group. En dos vencimientos a diciembre de 2025 y junio de 2026, esta última empresa, nombrada operadora de telecomunicaciones del futuro estadio, tendrá que saldar los 42 millones restantes.
Peligro de pérdidas acumuladas
En los próximos días, el FC Barcelona tendrá que desvelar el misterio sobre la cifra anotada en los estados financieros con el visto bueno del auditor Crowe Global, así como otros detalles económicos del ejercicio. En cualquier caso, el tercer mandato de Laporta al frente de la entidad llegará a su fin en 2026, y el dirigente catalán se expone a las pérdidas acumuladas definitivas.
Los ingresos anotados por el Barça en la temporada 2023-24, frente al presupuesto del ejercicio 24-25 FCB
En el cierre del tramo 20-21, se imputó un déficit de 481 millones, en el período 21-22, 98 millones de beneficios, en el 22-23, ganancias de 351 millones, en el 23-24, 91 millones de pérdidas, y en el 24-25, 17 millones de saldo negativo. El déficit de los cinco ejercicios consolidados alcanza los 170 millones.
Pérdidas infladas
A efectos legales, según la Ley del Deporte 10/1990, la junta directiva tendría que compensar con su propio patrimonio de forma solidaria las pérdidas económicas producidas durante su mandato. No obstante, en diciembre de 2020 entró en vigor una cláusula adicional del Real Decreto de Sociedades Anónimas que eximía a los clubes profesionales --Barça, Real Madrid, Athletic Club y Osasuna-- de responsabilizarse de las pérdidas en todos los ejercicios afectados por la pandemia de la Covid-19.
Laporta y su junta directiva en 2021 FCB
En consecuencia, la junta directiva de Laporta infló las pérdidas del curso 20-21 hasta los 481 millones. Primero, la plana mayor de la entidad catalana anotó un deterioro contable de la plantilla de 138 kilos: de los 597 millones a una valoración de 459 millones, a pesar de la explosión de talentos emergentes como Pedri.
La estrategia de Laporta
En segundo lugar, los dirigentes imputaron 90 millones de provisiones judiciales: 45 kilos por dos inspecciones abiertas de Hacienda y otros 45 procedentes de las costas en los juicios con Neymar. Aquella estrategia de aprovisionamiento de pérdidas sirvió para convertir el importe bloqueado en beneficios en el ejercicio siguiente.
La asamblea general ordinaria de socios del Barça en 2021 FCB
En realidad, solamente había 253 millones de pérdidas, pero se incrementaron otros 228 millones por la depreciación de jugadores y las costas judiciales con dos finalidades: primero, aprovechar la última reforma del decreto que liberaba de responsabilidad a los directivos y segundo, generar más pérdidas en el primer ejercicio con tal de revertirlas y generar más beneficios en el año contable 21-22.
Las palancas
En verano de 2022, llegó el turno de las denominadas palancas con una triple función: por un lado, brindar liquidez y generar Fair Play para llevar a cabo una revolución de la primera plantilla en el mercado de fichajes; por el otro, esquivar 120 millones de pérdidas para el ejercicio 21-22: por último, 150 millones se emplearon para rebajar las deudas a largo plazo.
Los resultados de la cuenta de explotación del Barça 2021-22 y los presupuestos 22-23 FCB
Para evitar otro año deficitario, se desprendieron del 10% de los derechos audiovisuales de la Liga a finales de junio por 25 años. El fondo de inversión Sixth Street desembolsó 207,5 millones, y la transacción se imputó en los balances con una plusvalía de 60 kilos. En total, 267,5 millones para equilibrar cuentas. Finalmente, se registró un beneficio de 98 millones en el período 21-22 gracias a la venta de patrimonio.
La venta de Barça Studios
Semanas más tarde, el club comercializó otro 15% adquirido por la misma entidad financiera a cambio de unos 320-330 millones, que se dispararon a los 400 kilos con la plusvalía incluida. El mismo verano de 2022, se acordó la venta del 49% de la filial Barça Studios con Orpheus Media, sociedad administrada en aquel entonces por Jaume Roures, y Socios.com. Aunque los compradores solo desembolsaron 20 millones inicialmente, la operación se valoró en 200 millones.
Bridgeburg Invest SL, la nueva sociedad de Barça Studios FCB
Dicha cantidad se anotó en los balances, a pesar de que estaba sujeta a compromisos futuros estipulados en un calendario de pagos. Por ello, los beneficios del año contable 22-23 se dispararon hasta los 304 millones. Cabe matizar que en el cierre 23-24, se corrigió al alza el resultado del ejercicio anterior, porque se registró una revalorización del 15% de los derechos audiovisuales vendidos en 2022: de 312 millones a 400,5. Por ende, los beneficios tras impuestos subieron de los 304 millones mentados a los 351 millones.
Fantasmas de 2024
Sin embargo, los impagos de los dos primeros compradores, y del fondo Libero Football Finance, posterior accionista de Bridgeburg Invest, desembocaron en un problema financiero que estalló en 2024. El calendario de pagos establecía que en verano de 2024 tendrían que haberse ingresado 140 millones de los 200 suscritos. Como solo se percibieron 55 millones tras la compra de participaciones por parte de Vestigia Holdings --20 kilos-- y Aramark --15 millones--, el auditor Grant Thornton obligó a depreciar la valoración del 49% de la sociedad hasta los 55 millones inyectados en las arcas.
En el ejercicio 23-24, el primero sin el impulso de las palancas y sin la facturación del Camp Nou, iba a cuadrarse en 12 millones de beneficios ordinarios. Con esto, el gasto extraordinario de 141 millones impuesto por el revisor de las cuentas malogró el esfuerzo titánico en los despachos.
Este 2025, la junta de Laporta revive los fantasmas del pasado: se equilibra la balanza de ingresos y gastos recurrentes con dos millones de beneficios, pero los desembolsos excepcionales descompensan una vez más el resultado después de impuestos hasta 17 millones de pérdidas. Aun así, el club insiste en una "progresiva recuperación económica" que no termina de llegar en cinco ejercicios de mandato.