La final de Copa, a punto de saltar por los aires: la reunión a tres bandas que agita a Laporta

La final de la Copa del Rey ha estado a punto de saltar por los aires. Una rueda de prensa ha generado uno de los mayores incendios de los últimos meses en el fútbol español. Los colegiados Pablo González Fuertes y Ricardo de Burgos Bengoetxea, árbitros designados para la gran cita, han estallado en rueda de prensa contra los vídeos de Real Madrid TV. El Real Madrid ha reaccionado con indignación y ha solicitado que sustituyan el equipo arbitral escogido.

Ante la negativa de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), la entidad presidida por Florentino Pérez ha amenazado con ausentarse del título que tiene más al alcance. La institución madridista se ha declarado en rebeldía y ha faltado a todos los actos protocolarios previos a la gran cita. La intermediación del presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), José Manuel Rodríguez Uribes, y de su homólogo en el ente federativo, Rafael Louzán, ha disuadido al Madrid de sus intenciones de no presentarse a La Cartuja, al menos, por ahora. Paralelamente, el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, ha acudido al banquete institucional sin intervenir en un conflicto que puede perjudicar los intereses del club azulgrana con los arbitrajes.

El estamento arbitral, harto

La controversia ha comenzado en una rueda de prensa que el colegiado González Fuertes, escogido para la sala VAR en Sevilla, ha aprovechado para amenazar con acciones legales si Real Madrid TV no cesa con sus vídeos contra el estamento: "No te quepa ninguna duda de que vamos a tener que empezar a tomar medidas. Muchísimas más de las que estamos tomando. En pocas fechas posiblemente tengáis ciertas noticias sobre lo que está aconteciendo y lo que va a venir".

Ricardo de Burgos Bengoetxea, juez que llevará las riendas del partido, no ha podido evitar emocionarse al lamentar el odio que generan los vídeos de la televisión madridista: "Cuando un hijo tuyo va al colegio y le dicen que su padre es un ladrón y llega a casa llorando, es muy jodido. Lo que hago es intentar educar a mi hijo para decirle que su padre es honrado, que se equivoca como un deportista más. Es muy jodido, no se lo recomiendo a nadie. (...) No hay derecho con lo que estamos pasando muchos compañeros y compañeras, no solo del fútbol profesional, también del fútbol base".

Laporta, de cena

Cronológicamente, una de las primeras reacciones ha llegado por parte de Hansi Flick, en la rueda de prensa posterior: "Debemos proteger a los jugadores, al árbitro. No está bien por su parte. Las emociones entran en juego, pero luego debemos dejarlo todo atrás. (...) Necesitamos a los árbitros". 

El FC Barcelona no ha vuelto a pronunciarse públicamente en toda la tarde del viernes 25 de abril. De hecho, la opinión del técnico alemán es la única versión oficial conocida del club catalán. En tanto, el presidente de la entidad, Joan Laporta, no se ha pronunciado a su llegada al Real Alcázar de Sevilla para la cena protocolaria, acompañado de directivos como la vicepresidenta institucional, Elena Fort, o el responsable de la sección de basket, Josep Cubells. En imágenes captadas por el diario Sport, el abogado catalán se ha limitado a levantar el puño para agradecer a los hinchas que lo vitoreaban en la entrada del recinto.

Dos comunicados 

Por su parte, el Real Madrid ha activado la maquinaria en los despachos, en señal de indignación con las palabras de González Fuertes y De Burgos Bengoetxea. La entidad encabezada por Florentino Pérez ha solicitado a la RFEF que releve a los árbitros designados para la final, petición que el ente presidido por Rafael Louzán ha denegado. En respuesta, la institución madridista se ha ausentado de la rueda de prensa, ha dado plantón a sus homólogos en la cena y ha amenazado con no presentarse al partido. Además, ha emitido un primer comunicado en el que no ha anunciado medida alguna, pero ha instado nuevamente a la Federación a que adopte "las medidas correspondientes en defensa del prestigio de las instituciones que representan". 

Paralelamente, el club madrileño habría filtrado a algunos medios sus intenciones de no comparecer en La Cartuja. El arrebato a media tarde solo ha durado unas horas, hasta que han redactado un segundo comunicado para desmentir la presunta amenaza: "El Real Madrid comunica que nuestro equipo nunca se ha planteado renunciar a jugar la final de mañana". Con esto, la entidad ha señalado la "animadversión" y "hostilidad" por parte del colectivo arbitral.

Intervención del CSD

¿Qué ha ocurrido de un comunicado a otro? En ese lapso de tiempo, las altas esferas del Real Madrid se han reunido con los dirigentes del Consejo Superior de Deportes (CSD), órgano dependiente del Gobierno español. Según varias informaciones, el presidente del ente, José Manuel Rodríguez Uribes, habría intercedido para que el club blanco desistiera de sus intenciones. Desde Valdebebas pretendían que el CSD o incluso, la FIFA, interviniesen. Cuando menos, deseaban la sustitución González Fuertes en el supuesto de que no fuera posible relevar a todo el equipo arbitral de la final.

Javier Tebas sonríe situado a escasos metros de José Manuel Rodríguez Uribes, presidente del CSD EUROPA PRESS

El secretario de Estado para el Deporte mantiene una amistad con Florentino y ha ejercido de aliado en la cruzada judicial contra Javier Tebas. El CSD ya ha elevado al Tribunal Admistrativo del Deporte dos denuncias del Real Madrid contra el máximo dirigente de la Liga. También frenó los pies a la patronal con la cautelarísima concedida al Barça para mantener las inscripciones de Dani Olmo y Pau Víctor en la competición doméstica.

Louzán calma las aguas

La RFEF, directamente involucrada en el conflicto, también ha intercedido a través de su presidente, madridista confeso, Rafael Louzán. El político gallego ha limado las asperezas del ente federativo con el Real Madrid en los últimos meses, y ha formado parte de las reuniones para destensar el enfrentamiento copero entre el Comité Técnico de Árbitros (CTA) y el club capitalino.

Joan Laporta, Rafael Louzán, el cónsul honorario de España en Riad y Emilio Butragueño EFE

"Apelo al sentido común y a la responsabilidad. He hablado ya con el Real Madrid. Espero que mañana veamos un gran partido, que es lo importante. Ya he hablado con quien tenía que hablar", ha declarado sin dar más detalles a los medios sobre la polémica. Salvo nuevo arrebato madridista, la final se jugará. Por lo tanto, los dirigentes barcelonistas mantienen la tranquilidad.

Rafael Louzán, Juanma Moreno, Jesús Navas y Joaquín Sánchez posan con el trofeo de la Copa del Rey en Sevilla EFE

De no haberse presentado el Real Madrid, el partido se habría celebrado igualmente en otra fecha por determinar. Según el artículo 80 del Código Disciplinario de la RFEF, la Real Sociedad, semifinalista eliminado por los pupilos de Carlo Ancelotti, habría sido el rival azulgrana: "Siendo la competición por eliminatorias se considerará perdida para el incomparecido o retirado la fase de que se trate, y si se produjese en el partido final este se disputará entre el otro finalista y el que fue eliminado por el infractor".

Tebas y las redes

No ha trascendido la participación de la Liga en las conversaciones de armisticio. Aun así, Javier Tebas no ha podido reprimirse en Twitter. El dirigente de la patronal ha cargado duramente contra Florentino: ""No le gusta Tebas porque no le hace lo que él quiere. No le gusta Ceferin porque no hace lo que él quiere. No le gusta Louzán porque no hace lo que él quiere. No le gustan los comentaristas de TV porque no dicen lo que él quiere. No quieren que se avance en la reforma arbitral porque no es la que él quiere".

El presidente de la Liga, Javier Tebas, estalla contra las medidas de protesta del Real Madrid y la amenaza de ausentarse de la final de Copa del Rey CAPTURA

"Y ahora, tras las declaraciones de los árbitros —hartos del acoso constante desde Real Madrid TV—, responde como sabe: Suspende la rueda de prensa. Se salta el entrenamiento en La Cartuja. Desprecia los actos oficiales de la final de Copa. Filtra que no se va a presentar en la final de la Copa. Qué piel tan fina. No protesta, presiona. No se queja, amenaza. No discrepa, castiga. No quiere mejorar el fútbol, quiere su fútbol. Y lo más grave no es que lo intente. Lo grave es que muchos lo permiten, lo consienten y le ayudan", ha sentenciado Tebas sobre la manera de obrar del mandatario madridista.