El FC Barcelona se prepara el regreso al Camp Nou. Un retorno que se hará con una capacidad limitada. El estadio final tendrá tres gradas, pero la última seguirá en construcción a principios de 2025, fecha en la que los culés bajarán de Montjuïc a Les Corts. Las obras terminarán en 2026. Un año más tarde lo harán las del Valencia CF.
La institución che tendrá un estadio con una estética similar a la del Camp Nou. Sobre todo por la cubierta y la fachada. Después de mucho tiempo, ya hay un proyecto definitivo, con un coste final que asciende a los 140 millones, a pesar de que se cifró en 119 kilos en una fase inicial, y un aforo de 70.044 aficionados. Las similitudes son evidentes.
En el documento al que ha tenido acceso eldiario.es, se detalla que el "nuevo diseño de la cubierta del edificio" se llevará a cabo "mediante soluciones ligeras de cables tensados y con la implementación de sistemas de generación de electricidad fotovoltaica". Como en el caso del Barça, se dejará para el final por ser la etapa más complicada de edificar: "Es sin lugar a dudas el elemento de máxima complejidad tecnológica del edificio". Además, la estrategia de "cables tensados" es la misma que se usará para la cubierta del Camp Nou.
Como un mirador
El otro gran atractiva del estadio culé es la fachada, que servirá como un mirador 360 grados, que dará la vuelta al coliseo y servirá para observar la capital catalana en su máximo esplendor. El Valencia también ha optado por colocar una especie de balcones que den al exterior para el Nou Mestalla.
La gran diferencia entre ambos estadios es en la inmensidad de las dos obras. El Barça tiene un crédito de 1.450 millones para edificar todo el Espai Barça. Sin embargo, el proyecto del Valencia no supera los 250 kilos. El Nou Mestalla tendrá una capacidad de 70.044 asistentes. El nuevo Camp Nou, de 105.000.