Mensaje de Laporta a la afición: "Os pido paciencia"

La ilusión del barcelonismo pende de un hilo muy delgado. Cada una de las decisiones de la junta directiva del FC Barcelona ha llevado a la afición a no tener demasiadas expectativas en la temporada 2021-22. Una situación que se ha reforzado a partir del triste estreno en la Champions League contra el Bayern de Múnich. Ante semejante actuación, el presidente Joan Laporta decidió salir para tratar de calmar las turbulentas aguas.

A través de sus redes sociales, el dirigente azulgrana pidió a la hinchada del club que entendieran que esto forma parte de un proceso. “Hola culés. Estoy tan decepcionado como todos vosotros. Lo que ha pasado es uno de los escenarios que contemplábamos. Y os pido paciencia y que continúen apoyando al equipo. Y también confianza en las personas que estamos dirigiendo al club. Necesitamos su confianza y no tengan duda que solucionaremos esta situación”, declaró.

Laporta, inflado, se lleva las manos a la cabeza en el Camp Nou / EFE

Laporta, inflado, se lleva las manos a la cabeza en el Camp Nou / EFE

Si bien el mensaje de Laporta llega a pocas horas de esa gris presentación del conjunto en la Champions League, la realidad es que no ofrece ningún tipo de guía o detalle del trabajo que se hará para mejorar esa situación. Existe un aire de incertidumbre que rodea a la parcela deportiva, especialmente porque se desconoce el tipo proyecto que busca formar con Ronald Koeman como entrenador de turno.

Relación tensa

Justamente eso último es lo que despierta mayores dudas dentro de la afición del Barça: la débil conexión que existe entre el neerlandés y el mandatario de la entidad. En las últimas semanas se ha visto un claro intercambio de declaraciones en los distintos medios de comunicación, lo cual no ayuda a la estabilidad en ese sector del club. Ambos parecen distanciarse entre cada mensaje o cada partido que se juega.

Laporta y Koeman, una relación con muchos altibajos / FCB

Laporta y Koeman, una relación con muchos altibajos / FCB

Recordemos que Joan Laporta hizo bandera durante la campaña electoral que su Barça será ofensivo y buscaría dar espectáculo. Esa era una de las condiciones para la continuidad del entrenador. Sin embargo, en el cruce contra el Bayern de Múnich se vio todo lo contrario. El entrenador prefirió asumir el rol desde la inferioridad con tal de reducir el potencial ofensivo de su rival, pero eso lo que hizo fue mostrar una imagen pequeña del equipo ante la mirada de todo el Camp Nou.

La planificación de plantilla de Laporta y las decisiones de Koeman en el banquillo están siendo aspectos difíciles de digerir para el barcelonismo en general. El resultado es un equipo que deberá luchar contra viento y marea, en esa misión de obtener algún título en el curso actual. Un escenario que parece complicado, sobre todo por la diferencia que parece existir entre el FC Barcelona y el resto de competidores.