El Barça ingresa 152 millones en traspasos y cesiones este curso

Los culés temían que el 30 de junio volviera a suceder algo parecido a la operación Cillessen-Neto del curso pasado y así fue. Entonces se cifró el intercambio de porteros entre Barça y Valencia por 35 millones de euros. Ahora, tras el impacto del coronavirus, la argucia financiera que anunció Culemanía hace dos meses ha tenido que ser de un valor mayor.

Este lunes se oficializó la salida de Arthur Melo del Camp Nou. Cogerá rumbo a la Juventus de Turín a cambio de 72 millones de euros. De Italia llegará Miralem Pjanic, con un precio de 60 millones fijos más cinco de variables. De entrada, los culés salen con 12 millones positivos de este intercambio.

Arthur Melo ya posa con el escudo de la Juventus de Turín / JUVE

Arthur Melo ya posa con el escudo de la Juventus de Turín / JUVE

Se esperaba que con esta venta sumada a la de Marc Cucurella al Getafe por 10 millones de euros, se cuadraran las cuentas, pero no va a ser así. Según ha podido saber este medio, el desajuste es demasiado elevado y, aunque la diferencia se ha reducido mucho, se seguirán registrando pérdidas.

Superado lo previsto en otoño

En el pasado mes de octubre, cuando se presentó el presupuesto de esta temporada, Òscar Grau y Quique Tombas anunciaron un presupuesto en ingresos de 1.047 millones de euros, algo que calificaron de “récord histórico mundial para un club deportivo”. Esta temporada no se cumplirá debido al impacto económico de la pandemia.

Uno de los puntos sorprendentes de ese presupuesto es que marcaron como objetivo 124 millones de euros de la recaudación por venta de jugadores. En un club más comprador que vendedor como es el Barça, marcarse el objetivo de superar cada temporada los 100 millones en ventas parece incompatible con un modelo deportivo exitoso.

Òscar Grau y Josep Maria Bartomeu en una imagen de archivo / Redes

Òscar Grau y Josep Maria Bartomeu en una imagen de archivo / Redes

Aunque cae muy lejos, el verano de 2019 empezó con un traspaso importante económicamente hablando. Malcom Oliveira dejaba el equipo tras una gris temporada y cogía rumbo al Zenit de San Petersburgo por 40 millones de euros más cinco en posibles variables. Esta fue la venta más cuantiosa del verano, pero no la única.

Marc Cardona se fue al Osasuna por 2,5 millones de euros y Sergi Palencia al Saint-Etienne por dos. A las salidas de los canteranos cabe sumarle la de los cedidos. El Bayern de Múnich pagó ocho millones y medio por Philippe Coutinho, Emerson sigue en el Real Betis por seis y Todibo (Schalke 04) y Rafinha (Celta de Vigo) se fueron por un millón y medio cada uno.

Este mes de julio, el Barça recibirá ingresos ya acordados. Uno de ellos es la salida Carles Pérez en el mercado invernal. La Roma está obligada a pagar 11 millones de euros más 4,5 posibles en variables. También en enero se fue cedido Abel Ruiz al Sporting de Braga con obligación de compra de ocho millones de euros más dos posibles en variables. Estos 19 millones formarán parte del ejercicio contable de la temporada 2020-21.

Carles Pérez, presentado como nuevo jugador de la AS Roma / AS Roma

Carles Pérez, presentado como nuevo jugador de la AS Roma / AS Roma

Finalmente cabe recordar que las relaciones del Barça con la Juventus ya las vimos hace seis meses. Se intercambiaron a Alejandro Marqués, delantero del Juvenil A, por Matheus Pereira a cambio de 8,2 millones de euros. Un simple avance de lo que vendría posteriormente con Arthur Melo y Miralem Pjanic.

152 millones ingresados

A los 70,2 millones de euros que se habrían ingresado antes del mes de junio cabe sumarles las salidas de Arthur Melo (72) y de Marc Cucurella (10). En total se alcanzarán prácticamente los 152,2 millones de euros en ingresos. En todo caso, se superará lo anunciado en otoño.