Los tejemanejes de Florentino Pérez para cerrar un fichaje menor de edad

El Real Madrid se enfrentará este verano a un mercado de fichajes determinante para su futuro deportivo. Florentino Pérez no puede permitir una nueva temporada desastrosa, tanto a nivel de juego como también de resultados. Estas carencias, junto a la necesidad de rejuvenecer el vestuario implicarán muchos movimientos en la plantilla en el próximo verano. 

En este sentido, y pese a las pérdidas provocadas por el coronavirus, el conjunto madridista podría ser uno de los pocos equipos con las arcas llenas para acometer fichajes bomba. El máximo mandatario merengue tiene previsto realizar una limpieza importante, y sacar una cantidad notable por los más de diez futbolistas que podrían marcharse. 

Imagen de un entrenamiento del Real Madrid de Zidane | RM

Imagen de un entrenamiento del Real Madrid de Zidane | RM

El club blanco necesita refuerzos para todas las posiciones. No obstante, especialmente urgente es la llegada de un fichaje para el centro del campo. Modric y Kroos cada vez tienen menos peso en el equipo, y se buscará la llegada de un centrocampista joven con mucha proyección, para liderar al equipo durante los próximos años. Y tanto Zidane como Florentino tienen claro quién debe ser. 

Un adolescente dispuesto a salvar al Madrid

Pese al interés en Paul Pogba y Fabián Ruiz, la secretaría madridista tiene la intención de cerrar cuanto antes la operación de uno de los futbolistas destinado a dominar Europa durante la próxima década: Eduardo Camavinga. Todas las superpotencias mundiales suspiran por el jugador del Rennes. Del jugador angolano convence su combinación de capacidad física, junto al talento para jugar en diferentes posiciones del centro del campo. 

No obstante, sacarle de Francia no será fácil. El equipo francés intentará aprovechar el interés que ha suscitado su temporada para inflar su precio. Diferentes informaciones apuntan que podrían pedir por él cerca de 100 millones de euros. Sin embargo, la realidad es que al tratarse de un jugador de 17 años, difícilmente ningún club pagará esa desorbitada cantidad por él. 

Por tanto, se trataría de una negociación compleja. Su contrato acaba en 2022, y parece claro que no renovará. Lo que es evidente es que, si Florentino Pérez quiere llevárselo ya, tendrá que pagar una cantidad importante por él. Y el precio podría no ser el único inconveniente para acometer este traspaso.

¿Es legal fichar a un menor de edad?

En los últimos años, Florentino Pérez ya ha intentado hacerse con jugadores que todavía no habían alcanzado los 18 años. Fue el caso de los brasileños Vinicius, Rodrygo y Rainier Jesus, con los que el club se tuvo que esperar a que cumpliesen la mayoría de edad para firmarlos. No obstante, el Estatuto sobre Transferencias de Jugadores de la FIFA, la norma por la que debe regirse todo el fútbol internacional, podría favorecer al Real Madrid en el caso de Camavinga, según adelantó el diario AS. 

Dicho estatuto, en el apartado IV (Transferencia de jugadores menores de edad) es taxativo en cuando a la prohibición del traspaso internacional de menores de 18 años. Por tanto, según esta definición, el conjunto merengue tendría que esperarse al próximo mes de noviembre, cuando el angolano haga los 18 años, para poder ficharle. Sin embargo, se establecen también algunas salvedades que son las que podrían salvar a la entidad madridista. 

Eduardo Camavinga calienta con el Rennes / EFE

Eduardo Camavinga en un partido del Rennes / EFE

Entre ellas, el Madrid podría fichar a Camavinga si proporcionase formación al jugador hasta la mayoría de edad, que le garantizase una formación académica o escolar, o una formación o educación y capacitación conforme a su vocación, que le permita iniciar una carrera que no sea futbolística en caso de que cese en su actividad de jugador profesional y tomar todas las previsiones necesarias para asegurar que se asiste al jugador de la mejor manera posible.  

Por su parte, hay otro hecho que es determinante para que Camavinga sea una buena opción para el Madrid. El pasado mes de noviembre obtuvo la nacionalidad francesa. De origen angoleño, el centrocampista llegó al país vecino con seis años, acompañado de sus padres. Ahora, no sólo puede ser convocado por Deschamps para la selección absoluta (ya ha jugado un partido con la Sub-21), sino que, además, no ocuparía plaza de extracomunitario en una plantilla, la del Real Madrid, cargada de ellos: ahora Vinicius, Reinier, Rodrygo, Militao, Kubo…