Sergio Ramos contra Messi: la historia de una caza salvaje

El partido de este sábado fue otro ejemplo más de las malas relaciones entre Messi y Sergio Ramos. En otros clásicos ya se han visto las caras y se han encarado pero pocas veces como sucedió minutos antes del descanso en el clásico liguero (0-1).

Justo antes de que Alberto Undiano Mallenco silbara el final de la primera parte, el capitán del Real Madrid dejó un codazo en la cara del argentino del Barça. El 10 fue por el suelo retorciéndose de dolor y cuando se reincorporó se encaró con el andaluz reprochándole la acción con el labio abierto.

El colegiado no sancionó nada. Ni siquiera amarilla. Una zancadilla combinada con un golpe de brazo que quedaba sin sanción. El colegiado decidió zanjar la polémica con el descanso. Ni en el VAR –con Mateu Lahoz como protagonista– decidió intervenir.

Otros duros precedentes

Los capitanes de Barça y Real Madrid son dos viejos conocidos en los clásicos. No es la primera vez que Leo desquicia al central de Camas. Tal es así que hay agresiones que le han costado la tarjeta roja, como el clásico liguero en la temporada 2014-15. Messi se iba por la banda y Ramos lo cazó.

Ha habido otras veces que no ha sido sancionado. Pegar al argentino en un clásico sale barato. Se recuerda la de 2011 en una acción con Lassana Diarra que sin opción de tocar el balón ambos fueron a tumbar el extremo culé. El andaluz también fue expulsado. 

Un año después también abandonó el verde antes de tiempo con un codazo a Sergio Busquets. En 2014 fue a la caza de Neymar y le hizo penalti. De nuevo, otra expulsión. Cuatro expulsiones desde que juega en el Real Madrid. El jugador más expulsado de la Liga volvió a hacer de las suyas, esta vez sin sanción.

Palabras de Ramos sobre la acción

Después de partido, Sergio Ramos habló sobre la polémica acción. "Messi se lo tomó mal, pero ha sido totalmente involuntario. No ha habido ningún mal gesto entre ambos y ha sido algo muy puntual", dijo quitándole importancia.

Leo Messi encarándose con Sergio Ramos / EFE

Messi encarándose con Sergio Ramos / EFE

Sobre los pobres registros merengues frente al Barça, el de Camas se limitó a decir: "El Barça no es una pesadilla para nosotros. El otro día ellos tuvieron gol y eficacia, y nosotros no la tuvimos. El fútbol al final lo marcan los goles y teníamos una oportunidad en la Liga de recortar diferencias y no hemos podido aprovecharla, porque dispusimos de ocasiones pero el resultado no ha sido así”.

A no ser que los eternos rivales se crucen en Champions League ya se han disputado todos los clásicos de la temporada. El balance es favorable a los blaugranas. De los cuatro partidos, tres victorias y un empate. A la final de la Copa del Rey y la Liga medio sentenciada. Ramos y el madridismo deberán esperar un año más.