Pásate al MODO AHORRO
Un fisioterapeuta del Barça trata unas molestias de Lamine Yamal en la espalda, durante el calentamiento del partido contra el Rayo Vallecano

Un fisioterapeuta del Barça trata unas molestias de Lamine Yamal en la espalda, durante el calentamiento del partido contra el Rayo Vallecano REDES

Hablemos del Barça

Las lesiones de Lamine

Publicada
Actualizada

Dicen que a la tercera va la vencida. Esto se espera de la gestión de las lesiones que se debe hacer de Lamine Yamal. Vamos a ponernos en antecedentes para resumir el tema. En otoño de 2024 tuvo dos lesiones consecutivas en el tobillo derecho. Fruto de ello, estuvo varias semanas de baja. Lo que irritó a su entorno, que no lo puede domar, es que desafiara las recomendaciones y siguiera jugando, pese a estar tocado. No volveremos a dar más detalles del partido, el rival o el grado de lesión. Lo que nos debe quedar en la mente es que Lamine, todavía siendo menor de edad, pasó olímpicamente de los expertos, del propio míster Hansi Flick y se sometió a los límites que él consideró hasta que petó.

Ya por aquel entonces, su entorno más directo explicaba que la lesión corría ciertos riesgos en el medio y largo plazo si no se cuidaba bien. Tras superar una dolencia que parte de problemas musculares, posteriormente, recae el peso de la gran responsabilidad a la profesionalidad que tengan los lesionados para recuperarse.

Pues bien, en el periodismo las casualidades no existen y en el fútbol parece que tampoco. La pubalgia que ha sufrido durante más de cuatro semanas en este mes de septiembre también tiene conexiones con un tobillo tocado, pero especialmente, con unos hábitos que no son los mejores para fortalecer su cuerpo en una postadolescencia que lleva a otro nivel. Que Lamine Yamal es de otro planeta con un talento innato es incontestable. Que Lamine nos hace callar cada vez que sale al campo, también. Pero no es menos cierto que esta pubalgia ha sido de grado alto y, cuando este tipo de lesiones se alargan en el tiempo, pueden derivar en una operación porque les impide a los jugadores esprintar y ser revulsivos. El gran interrogante es si esta pubalgia se cronificará y volverá a aparecer más pronto de lo que nos imaginamos.

Mientras tanto, es de recibo señalar el trabajo de la Federación Española de Fútbol y la falta de comunicación que demostró con el FC Barcelona. En el parón por selecciones, los servicios médicos le pincharon para poder apurar y contar con Lamine y el resultado, aunque no haya influido por bien o por mal, es indudable que se practicó de espaldas al club. Con razón, Hansi Flick estaba cabreado. Pero, ¿Lamine Yamal no tiene algo que decir también en ello? Si es adulto para cobrar 20 kilos por temporada, también lo es para ser más profesional. Dentro, pero también fuera del campo.