El sábado nos quedamos sin el Barça-Madrid por los motivos que todos conocen y, con ello, sin las obras de arte de Messi, Arthur, De Jong, Griezmann y Suárez. De todos modos, hay arte más allá del clásico (y no me refiero al partido contra el Valladolid de este martes; por suerte, hay jornada intersemanal). Hay artistas del Barça que jamás han pateado un balón, pero que no han dejado a nadie indiferente con sus plasmaciones de lo que les transmite la mayor entidad deportiva de Cataluña.
Podemos hablar de Joan Miró y su cartel conmemorativo –de difícil comprensión– del 75 aniversario del Barça; o de Salvador Dalí, quien, con motivo de la efeméride, dibujó un futbolista sin rostro, sin alma, pero con el escudo azulgrana en el pecho, en el hueco del corazón. El artista Jordi Alumà ha centrado algunos de sus cuadros en el universo blaugrana, igual que Josep Segrelles. También Antoni Tàpies pintó en cinco minutos un lienzo por el centenario de la institución. Y hay que mencionar a dibujantes como Valentí Castanys, Cesc, Óscar Nebreda –creador del personaje Jordi Culé– y Kap.
Obras de Joan Miró, Salvador Dalí y Antoni Tàpies centradas en el Barça
En esta relación no podemos olvidar a los escultores Josep Maria Subirachs y Josep Viladomat, autor este de la estatua del Avi del Barça ubicada en la Masía original.
Del mismo modo, la literatura y la poesía han bebido del FC Barcelona, con autores como Josep Maria de Sagarra y su poema Blau i grana (con motivo de la inauguración del Camp Nou), y Manuel Vázquez Montalbán, o la Oda a Platko que escribió Rafael Alberti al portero azulgrana a raíz de la final del Campeonato de España de 1928. A partir de aquí, son varios los escritores que se han aventurado a explicar el mundo blaugrana y a biografiar a sus protagonistas.
El Avi del Barça, de Josep Viladomat, y Jordi Culé, de Óscar Nebreda
La música también se ha teñido de azulgrana. Hay tantas canciones que este apartado bien merece otro artículo. Pero una buena pincelada recoge el Cant del Barça –el himno del club, escrito por Jaume Picas y Josep Maria Espinàs–; el tango que Carlos Gardel dedicó a Samitier; Serrat y su Temps era temps, y las parodias de La Trinca.
'Temps era temps', de Serrat
Incluso la danza absorbió la plasticidad del Barcelona en Foot-ball, de Cesc Gelabert, que proyectaba jugadas del equipo de las épocas de Rijkaard y Guardiola-Vilanova.
La arquitectura, por su parte, está presente en cada estadio que levanta el Barça, y que repasamos recientemente –a la espera del Nou Camp Nou–.
Y al cine y al teatro con protagonistas blaugranas –Zamora, Kubala, Iniesta y Ramallets, entre otros, han aparecido en la gran pantalla– ya le dedicamos también una entrada anterior.
Arte y Barça en toda su extensión.