El vestuario del Barça se vuelca como nunca con Iñigo Martínez en su despedida: “Gracias por todo, mi capitán”

Iñigo Martínez se va del FC Barcelona después de una corta aventura de dos años. Corta, pero intensa. En su primera temporada, prácticamente no jugó. Con la llegada de Hansi Flick, so rol cambió por completo y se hizo titular indiscutible. El central vasco se convirtió en el líder de la defensa y en un capitán sin brazalete. Tras haber llegado como agente libre, Iñigo se marcha con los deberes hechos y habiendo entendido como pocos la idiosincrasia del club.

Lo demostró con el vídeo que publicó el pasado sábado para despedirse del Barça, un equipo que "ha marcado" su "vida", lleno de palabras sinceras y usando el catalán, idioma de la institución. "He vivido un sueño. Desde el primer día hasta el último, vestir esta camiseta ha sido un privilegio", añadió Martínez.

"Quiero agradecer a la afición por su cariño incondicional y a la ciudad de Barcelona, que ha sido mi casa y la de mi gente. Espero haber estado a la altura dentro y fuera del campo. Me marcho con el corazón lleno, sabiendo que el Barça siempre formará parte de mí", ha dicho Iñigo antes de terminar con el "visca el Barça i visca Catalunya" que tanto gusta a los culés.

Un vacío en el vestuario

La salida del central de 34 años se entiende económica, pero no deportivamente. Iñigo era una pieza vital en el esquema de Hansi Flick y uno de los jugadores más queridos dentro del vestuario. En el vídeo, define a sus compañeros como una "familia". Y lo demuestran todos los mensajes de cariño que ha recibido el defensa en redes.

La mayoría de compañeros se refieren a Iñigo como "capitán", a pesar de que sobre el papel no era ninguno de los cinco, y líder. Eso lo dice todo. "El vestuario te va a extrañar", le escribió Ronald Araujo. "Los culés siempre querremos gente como tú", le dedicó Héctor Fort. "Gracias por todo, mi capitán", resumió Lamine Yamal.

Iñigo se había ganado la confianza de los jóvenes, quienes, al final, son la columna vertebral del nuevo proyecto azulgrana. En condiciones normales, con un Barça saneado, su salida no se hubiera producido. Pero Martínez ha marcado el camino a seguir, siendo la extensión de Flick sobre el campo. Sus ya excompañeros deben hacer sentir orgulloso a Iñigo en esta próxima temporada.