El talento de la Masía arrepentido de su salida: "Me equivoqué dejando el Barça"

Los focos vuelven a apuntar a la Masía. Durante muchos años despreciada ante la saturación de vacas sagradas en el primer equipo del Barça, la cantera azulgrana brilla de nuevo. Primero, Xavi Hernández, y ahora Hansi Flick, han devuelto el fútbol formativo al pedestal que le corresponde. Estrellas precoces de la talla de Lamine Yamal, Gavi, Alejandro Balde, Fermín López, Marc Casadó o Marc Bernal gozan de la importancia merecida.

Una cuota de participación impensable años atrás, cuando los afortunados que traspasaban la barrera del primer equipo se contaban con los dedos de una mano. Ilaix Moriba era un talento generacional señalado para hacer carrera en can Barça, pero la codicia estropeó lo que pudo ser. El mediocampista nacido en 2003 todavía lucha por eclosionar, cuatro años después de su salida por la puerta de atrás del Camp Nou. Un error mayúsculo del jugador, que ahora se arrepiente públicamente.

Error mayúsculo

"Me equivoqué saliendo del Barça. Era muy joven y tenía muchas presiones, por un momento pensé que se acababa todo. Por suerte, ahora soy feliz en el Celta", ha reconocido el centrocampista de 22 años en unas declaraciones desveladas por su representante, Toni Pérez Toran, y su agentia as1sports, en redes sociales.

No es la primera vez que la joya de la Masía admite las equivocaciones que cometió en los primeros pasos de su carrera. Más allá de tomar la determinación de marcharse, el gran error residió en la gestión de las negociaciones para renovar por el club azulgrana, con exigencias económicas fuera de lugar.

Exigencias astronómicas

En 2024, cuando aterrizó en Getafe para el mercado de invierno, ya entonó el mea culpa: "He tenido errores y de eso se trata en la vida, de aprender lo que uno ha hecho. Le tengo un grandísimo amor al club de mi vida, el Barcelona. Tuve errores y ahora estoy en un momento en el que quiero que todo el mundo vea al jugador que vio".

A mediados de 2021, Moriba abandonó los servicios de la agencia Stellar Group y se comprometió con la empresa Rogon. El cambio de intermediarios desembocó en unas exigencias astronómicas para su rol, recién salido del filial. Si ya percibía dos millones de euros, el jugador pedía seis kilos a la nueva junta directiva de Joan Laporta para renovar su contrato en su año de novicio con el primer equipo.

"Los agentes lo abdujeron"

El director deportivo, Ramón Planes, rechazó la petición y buscó nuevo acomodo al jugador a un año de finalizar su contrato. El Red Bull Leipzig puso 16 millones sobre la mesa y concluyó de forma abrupta a su trayectoria de 11 años en el club catalán.

El propio ejecutivo ilerdense culpó años más tarde de su traspaso a los agentes del mediocentro: "Ilaix Moriba era un jugador de mucha calidad. Titular en el Barça con 17 años. Pero su entorno..., los agentes abdujeron al chico para hacerle ver lo que era mejor para él. Dejó el club por un motivo económico".