Los futbolistas de élite gozan de ciertas ventajas socioeconómicas, dada su remuneración en una industria tan próspera como la del balompié. Sin embargo, más allá de esa tranquilidad de tener la vida solucionada con una administración responsable de sus fortunas, la salud mental los iguala al resto de terrestres. Las inseguridades atacan a todo el mundo y la fortaleza mental, lamentablemente, no depende de la habilidad con el balón. De ahí que estrellas tan reconocidas como Andrés Iniesta, Bojan Krkic y otros cracks más recientes hayan padecido depresiones y trastornos de ansiedad.
En la actualidad, la presión de un Barça no tan acostumbrado a ganar ha aumentado. Con un margen económico escaso, cada fichaje del FC Barcelona supone una apuesta más arriesgada. Incorporaciones de la era moderna azulgrana como Ferran Torres, Oriol Romeu y Raphinha han atravesado etapas aciagas de sufrimiento silencioso. Incluso cracks del basket barcelonista como Ricky Rubio y Álex Abrines han tenido que frenar temporalmente sus respectivas carreras. Afortunadamente, la sensibilidad con la salud mental también ha crecido.
La ansiedad de Bojan
No obstante, la visibilidad actual no sería posible sin los valientes testimonios de personas como Bojan. Imaginen cargar con el peso de ser bautizado como el nuevo Messi en una constelación de estrellas llamada Barça. Con tan solo 17 años, el niño prodigio de Linyola ya destacaba en el equipo dirigido por Frank Rijkaard. Con esto, ya habían empezado sus episodios de ansiedad a mediados de su temporada de novicio en la élite, la 07-08.
"Yo estaba las 24 horas del día mareado. Cuando vivía la situación de ansiedad era como una ola que se descontrolaba, el mareo aumentaba, me dolía la cabeza, la visión...", relató en The Wild Project el actual coordinador del área de fútbol azulgrana.
En esa tesitura, no hubo más remedio que rechazar la llamada de Luis Aragonés para la Eurocopa de 2008. Meses antes, el delantero ya había sufrido varios episodios en sus primeras convocatorias con la selección española: "Llega el día del partido, vamos a ver el césped y cuando vuelvo al vestuario, me siento y me llega la ola. Ahí dije, estoy liquidado. Tenía a Iniesta al lado y le dije 'Andrés, me estoy mareando'. Él llamó al médico y me fui a la zona de fisios. Me tumbaron. Mis compañeros no eran conscientes de mi situación pero al doctor se lo cuento todo. No juego ese partido y se dice que no juego por una gastroenteritis. Eso no me molestó".
La depresión de Iniesta
Precisamente, Andrés Iniesta vivió en sus propias carnes años más tarde la desolación de una depresión. A los 12 años, el genio de Fuentealbilla tuvo que separarse de sus padres para formarse como futbolista en la Masía. En 2009, la repentina muerte de su amigo Dani Jarque degeneró en un abatimiento progresivo del futbolista autor del gol que valió un Mundial para España.
Iniesta celebra su gol al Chelsea, en 2009
"Cuando estaba luchando contra la depresión, el mejor momento del día era cuando tomaba mis pastillas y me acostaba. Perdí las ganas de vivir. Abracé a mi esposa, pero era como abrazar una almohada. No sientes nada", confesó la leyenda del Barça, también en el programa The Wild Project.
La felicidad está en uno mismo, y un futbolista que se granjeó la admiración de un país entero lo sabe a la perfección. De nada sirvieron todos los logros cosechados ni las ganancias materiales: "Si viene de alguien famoso, que en teoría tiene todo el dinero del mundo dices: 'Hostia, que esto le puede suceder a cualquiera'. No se trata de las cosas materiales".
La superación de Morata
Andrés y Bojan abrieron el camino. Tras conquistar la Eurocopa de 2024 con la selección española, Álvaro Morata dedicó un especial agradecimiento a ambos exfutbolistas. El nuevo fichaje del AC Milan tuvo que sobreponerse a una avalancha de críticas cada vez que vestía la camiseta del combinado nacional, y la del Atlético de Madrid.
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"Andrés Iniesta y Bojan tienen gran culpa de que esté aquí en la Eurocopa. Como jugadores ya los conocía, como persona a Andrés también, a Bojan no, pero son personas que te da la vida y darles las gracias. Han pasado momentos como los que yo he pasado y siempre está la luz al final de todo", declaró el ariete madrileño a TVE.
El bloqueo mental de Oriol Romeu
Cuando el balón no ha entrado en la portería y el rendimiento no ha acompañado, otros compañeros de profesión de Morata han tenido que resurgir de sus cenizas. Oriol Romeu regresó a can Barça en verano de 2023 con la misión de ocupar la alargada sombra de Sergio Busquets. El pivote de Ulldecona fue de más a menos hasta desaparecer de las alineaciones. Unas molestias en la rodilla, sumadas a un bloqueo mental, alejaron al 14 de su mejor versión. En Culemanía ya explicamos que adelgazó 7 kilos durante la temporada 23-24.
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"Lo que más daño te hace es no poder ayudar a tus compañeros, acabar el partido y decir: 'Hoy llego a casa con un buen feeling'. Cuando esto no pasa le das muchas vueltas durante la semana", se sinceró Romeu en la presentación del torneo MIC 2024.
La resiliencia de Raphinha y Ferran
En el mismo vestuario del Barça, Raphinha no tuvo reparos en reconocer que se había planteado abandonar el fútbol a sus 27 años. "Bien recientemente pensé en dejar todo por problemas personales y profesionales. Pensé en desistir, dejar el fútbol, porque no tenía necesidad de pasar por algunos problemas mentales o por dificultades y agresiones por parte de los medios o de aficionados", manifestó en una rueda de prensa el extremo brasileño.
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Una resiliencia similar a la que exhibió el tiburón Ferran Torres para salir del pozo personal tras una temporada 22-23 complicada. "Me puse en manos de un profesional, le conté toda mi historia, y fue el momento de hablar con mi familia, mis amigos, mi círculo de confianza y apoyarme en ellos. La opinión que me importa es la que tengan ellos de mí y la mía", contó el delantero valenciano en El Hormiguero.
El 'break' de Ricky Rubio y Abrines
En el Barça de basket hasta Ricky Rubio y Álex Abrines habían tenido que poner punto y aparte a sus trayectorias en la NBA por su propio bienestar. El base del Masnou publicó una carta a corazón abierto en enero de 2024 para explicar la decisión de paralizar su carrera: "El 30 de julio fue una de las noches más duras de mi vida. Mi mente se fue a un lugar oscuro. En cierto modo sabía que iba en esa dirección, pero nunca pensé que no estaba bajo control de la situación. Al día siguiente decidí dejar mi carrera profesional".
En cuanto al escolta, actual capitán del cuadro barcelonista, rescindió su contrato con los Oklahoma Thunders debido a problemas personales. Posteriormente, ya recuperado, el jugador catalán pudo explicar sin tapujos los verdaderos motivos de su salida de la liga norteamericana: "No tenía ganas de entrenar, pero tampoco de ir a comer fuera con mi pareja o jugar unos bolos".