Las finales de la NBA han empezado. Los Boston Celtics y los Dallas Mavericks --de un exmadridista, Luka Doncic-- se enfrentan por el ansiado anillo. El TD Garden, pabellón de los celtas, recibió una visita inesperada durante la madrugada de este 7 de junio. Una leyenda del barcelonismo, Pep Guardiola, presenció el primer partido en la lucha por el campeonato.

Y escogió bando. El entrenador del Manchester City llevaba con orgullo una sudadera de los Celtics. Estaba sentado en primera fila, lugar privilegiada para ver el parqué y los jugadores en acción. Los verdes arrasaron a los Mavs de Doncic (107-89). Las lecciones de Pep no le hubiesen ido mal a los visitantes, que solo repartieron 9 asistencias en todo el encuentro.

Pep Guardiola en las finales de la NBA NBA

Guardiola es un gran admirador de la liga de baloncesto estadounidense. Admira a los Celtics. Y mantiene una buena relación, presuntamente, con el entrenador principal de los de Massachusetts, Joe Mazzula. El pívot del conjunto local, el dominicano Al Horford, quedó alucinado con su presencia. "No me lo podía creer. Que estuviese aquí con nosotros. Es el mejor entrenador, es muy especial que esté aquí", reconoció a MARCA.

Guardiola siendo Guardiola

Pep tuvo la oportunidad de dirigirse a los jugadores de los Celtics. "Lo único que me dijo es que veníamos jugando de una forma todo el año y teníamos que jugar así porque nada iba a cambiar y estaríamos bien", afirmó Horford. Como no podía ser de otra manera, el técnico de Santpedor habló de táctica. Las cámaras lo captaron charlando con Mazzula sobre estrategias y pizarra.

El partido en el TD Garden estuvo marcado por la presencia de Guardiola, que además fue un amuleto para los Celtics. Los de Boston se llevaron el primer partido. Sin contemplaciones. Pep compartió su filosofía de juego. Todos quedaron prendados con el exentrenador y jugador del Barça.

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