Xavi Hernández no se puede contener. Vive los partidos del FC Barcelona como un aficionado más. Es un culé de cuna y lo demuestra en cada partido. Aunque ocupe el banquillo azulgrana y tenga más responsabilidad. En el último encuentro de Liga, contra el Atlético de Madrid en el Metropolitano, el técnico egarense fue expulsado en el minuto 41.
El equipo arbitral echó al entrenador del Barça tras sus continuas protestas. Primero le enseñaron la amarilla por una falta señalada que había recibido el delantero polaco Robert Lewandowski. Pese a la advertencia, el míster blaugrana siguió mostrando su malestar de manera insistente. La paciencia del cuarto árbitro se agotó, y mandó al principal a aleccionarle con la tarjeta roja.
Conducta repetida
La gestualidad protestona de Xavi es algo que se viene repitiendo en todos los partidos. Sobre todo en esta temporada en que las cosas no han salido como el técnico catalán hubiera deseado. Hasta ahora. La frustración del entrenador superó la barrera de la pantalla. La desesperación llegó al mismo periodista Xavi Valls, de TV3, pero al ver al entrenador del banquillo del Barça.
"Alguien le tendría que recordar a Xavi que es el entrenador. No puede vivir el partido como si fuese un miembro de los Boixos Nois", manifestó el profesional de la información en X --antes Twitter--. El tuit le ha traído algunas críticas, aunque las protestas del técnico son habituales en cada partido.
22 tarjetas amarillas
Xavi Hernández ha sido apercibido esta temporada con 22 tarjetas amarillas. Además, ha sido dos veces expulsado. Este es el motivo de la analogía de Xavi Valls. El técnico del primer equipo puede perderse de uno a dos partidos por haber sido expulsado contra el Atlético de Madrid.
Xavi Hernández, molesto con el arbitraje en el Wanda Metropolitano antes de su expulsión
"Soy pasional, soy intenso. Intento transmitir mi pasión e intensidad a los jugadores y a veces me equivoco, soy humano", manifestó Xavi después del partido de Liga contra el Athletic.
Esta situación ha acabado de cansar al colectivo arbitral, que ahora sanciona con más facilidad al entrenador del Barça. En el Metropolitano, expulsaron al míster egarense por "realizas observaciones de carácter técnico", según recogió el acta del partido. La secuencia de la expulsión muestra que las protestas no fueron tan intensas como en ocasiones pasadas, pero Xavi ahora está pagando los platos rotos.