El discurso de Aitana Bonmatí tras ganar el Balón de Oro dejó muchos titulares. Y no todos tenían que ver exclusivamente con el fútbol. Uno de los que más llamó la atención, y que muchos aficionados no conocían, fue la historia que contó la futbolista sobre el orden de sus apellidos. Algo que sus padres lucharon por cambiar desde que nació, para que pudiese lucir primero el de su madre.
"Gracias familia, amigos y equipo de trabajo, y a todas las personas que me han acompañado y que me han ayudado en el camino, pero sobre todo, gracias a mis padres, Rosa y Vicent, hoy presentes aquí", empezó la de Sant Pere de Ribes.
La lucha por el cambio de apellidos
"Vosotros luchasteis por cambiar la norma de los apellidos en España y lo conseguisteis. Yo llevo esa lucha y resiliencia en la sangre, y eso es gracias a vosotros", les dijo, mirándolos desde el escenario y visiblemente emocionada.
Bonmatí es el apellido de su madre, algo en lo que su familia es pionera, tal y como había revelado ya la jugadora en RTVE durante la Copa del Mundo. "En España cuando yo nací, la norma decía que el primer apellido tenía que ser el del padre, y eso, a los míos no les parecía bien y lucharon para cambiarlo", relató entonces.
Lo cierto es que la ley cambió dos años después del nacimiento de Aitana, en el año 2000, y hasta entonces la culé no pudo llevar el apellido de su padre, Conca, como hace actualmente. En vez de ello sus padres decidieron que luciera temporalmente los de su progenitora, Bonmatí Guidonet.
Responsabilidad dentro y fuera del campo
"Mis padres son personas que siempre han querido cambiar el mundo y la desigualdad que existe entre hombres y mujeres", reivindicó Aitana, muy orgullosa de sus orígenes y de lo que le han enseñado sus padres. Unos valores que ha heredado, pues la internacional culé no se olvidó durante su discurso en la gala del Balón de Oro de su papel en la lucha por la igualdad.
Después de haber felicitado a todas las nominadas al Balón de Oro, a quienes definió como "grandes e inspiradoras jugadoras", Bonmatí recordó que "como ejemplos a seguir, tenemos una responsabilidad dentro y fuera del terreno de juego", por lo que "debemos ser algo más que deportistas" y seguir "predicando con el ejemplo y luchando juntas por un mundo mejor, pacífico e igualitario". Sin duda, una futbolista que es mucho más que ello. Y que está dispuesta a aprovechar su posición para mejorar el futuro de las nuevas generaciones.