Vuelve la calma y la normalidad para Manchester City y Paris Saint-Germain. Pese a no estar mostrando su mejor nivel en los últimos partidos --sobre todo el equipo francés--, ambos conjuntos fueron capaces de sacar adelante sus respectivos partidos en la primera jornada de la Champions League.
Pep y Lucho hacen los deberes
Los skyblues doblegaron al Estrella Roja (3-1) tras el gol inicial de los serbios, y con una actuación destacada de Julián Álvarez. Dos goles del delantero argentino, más uno del centrocampista Rodri Hernández, sirvieron para que el equipo de Pep Guardiola se llevase los tres puntos y prosiguiese con su racha europea, donde acumula 27 partidos de Champions sin conocer la derrota.
En cuanto al PSG de Luis Enrique, el triunfo contra el Borussia Dortmund en el Parque de Los Príncipes fue sin duda una bocanada de aire fresco. Un gol de penalti de Kylian Mbappé y otro, de bella factura de Achraf Hakimi, certificaron la superioridad del PSG ante un Dortmund con problemas en un grupo de la muerte, donde también asoman Milan y Newcastle como tapados.
El PSG cambia de cara
La irrupción creadora de Vitinha, exjugador del Oporto, dio alas al plan de juego del Paris Saint-Germain, que impuso su estilo agresivo, de presión constante (2-0). Nada parecido el rendimiento de los de Luis Enrique al que han mostrado en este inicio de temporada en la Ligue 1, el peor arranque desde la llegada de Al-Khelaifi.
Luis Enrique, durante una rueda de prensa con el Paris Saint-Germain / REDES
Manchester City y PSG, en definitiva, superaron sus miedos iniciales para acabar la jornada europea con una sonrisa. Victoria especialmente importante para Luis Enrique, que sirve para acallar las críticas de la afición y mantenerle en el banquillo. El hecho de empezar con tres puntos en el grupo de la muerte es, sin duda, un gran comienzo para que el PSG empiece a cambiar el rumbo en las próximas semanas.