Decía un sabio llamado Johan Cruyff, el alma mater del estilo de juego que profesan los personajes que protagonizan el texto de hoy, que cuando hay dos jefes en un mismo barco, este se hunde. Y pese a que Xavi Hernández y Pep Guardiola entrenan a equipos distintos en la actualidad, ambos están subidos a la embarcación del barcelonismo, siendo grandes referentes.
Xavi y Pep, Pep y Xavi, dos hombres difícilmente criticados por el "tribunero" medio --que ya es decir-- y a los que nunca se le ha discutido su sentimiento culé, parece que, en el cíclico curso de las relaciones interpersonales, la de estos dos está en fase de depresión. Una crisis que entró en recesión cuando el de Terrassa firmó como técnico azulgrana y que, tras diversos episodios, ha ido perdiendo vida paulatinamente.
Vaya por delante que solo ellos poseen el conocimiento íntimo de cualquier posible roce. Sin embargo, de las recientes expresiones del actual estratega --también en rueda de prensa-- del FC Barcelona, siempre tan apreciadas por los intrépidos periodistas que solemos hacer un tsunami de una gota de agua, surgen insinuaciones sobre ciertas inquietudes que la demandante exigencia del ambiente barcelonista podría suscitar.
El entorno guardiolista, crítico con Xavi
Esto es especialmente perceptible entre aquellos que contrastan el actual equipo con aquel de la época dorada y anhelada del sextete, cuando Guardiola entrenaba a Xavi, y entre los cuales resultaría inútil incluir en el mismo análisis. Pese a ello, el actual entrenador, ya se mostró crítico con las críticas --valga la redundancia-- hacia su equipo, procedentes, a su criterio, de un entorno guardiolista anclado a la exigencia del mejor Barça de la historia. Malacostumbrado a ganar, y poco paciente en el proceso de resurgimiento entre los grandes.
"La figura de Pep se cierne sobre mí como entrenador. No considero que sea justo. Ya experimenté esto como jugador. Llega un momento en que todos debemos pasar página", declaró Xavi el pasado mes de mayo en una entrevista al programa Onze de Tv3.
Xavi y los amiguismos
"Estamos inmersos en un entorno que abraza el espíritu barcelonista, pero que en ocasiones prioriza la amistad antes que la pasión por el Barça. Podemos establecer lazos con exjugadores, exentrenadores, expresidentes y exdirectivos, lo cual quizás diluye la auténtica devoción hacia el club. En ocasiones, percibo en el entorno un guiño hacia el compañerismo, y eso, de cierta manera, no contribuye a la causa", verbalizó Xavi en el mismo intercambio.
Estas palabras fueron lo que el Atentado de Sarajevo a la Primera Guerra Mundial, el detonante de un conflicto que hizo intervenir a protagonistas y personajes secundarios. Por ejemplo, uno de los periodistas referentes de los culés, Ramón Besa, y públicamente reconocido como "barcelonista y guardiolista" afirmó que "no se ha sido especialmente crítico ni duro con Xavi; a lo sumo, quizás en algún artículo se ha comentado sobre el bajo rendimiento del equipo en algunos partidos; ha habido 12 victorias por 1-0".
La 'Manchesterización' del FC Barcelona
Igual que ocurrió en la época de Louis Van Gaal y la plaga de jugadores holandeses que ficharon por el Barça, o la Arsenalización del Barça de Joan Gaspart de principios de siglo, parece que ahora Xavi Hernández tiene una predilección especial por traer futbolistas del Manchester City, el mejor equipo del mundo en la actualidad. El modus operandi del entrenador egarense, sin embargo, no sería del agrado de Guardiola.
Difícilmente, alguien en el seno de los skyblues estará descontento con la venta de Ferran Torres al Barça en 2021 por 55 kilos, la primera petición de Xavi. A esto, se le ha sumado la llegada de Gundogan a coste cero, algo que no ha hecho tanta gracia. Además, varios jugadores citizens han sonado desde entonces para recalar en el Camp Nou, la mayoría propuestos por Xavi, siendo Joao Cancelo y Bernardo Silva los que portan rumores más intensos.
Xavi, sumido en pleno ataque de sinceridad durante la entrevista en los platós de la CCMA, fue contundente desvelando el veto del club inglés a la cesión de Cancelo al Barça: "Nos informaron que el Manchester City no estaba dispuesto a ceder a Cancelo al Barça". Finalmente, se fue cedido al Bayern. Guardiola, sorprendido en su sofá, aprovechó la ocasión que le brindó un matutino torneo de golf que lleva su nombre para responder a Xavi y asegurar que "alguien le había informado muy mal".
Las llamadas de Xavi
El modo de Xavi, efectivo e inteligente para sus intereses, empleado para convencer a los jugadores de que fichen por el Barça, es llamarles personalmente por teléfono. Y no en una ocasión, si la operación así lo requiere. Lo hizo con Gundogan, que se fue de Manchester tras siete años y como capitán citizen. Guardiola, antes de ser oficial este fichaje, declaró con su habitual sarcasmo que "le constaba que Xavi ha llamado al jugador varias veces".
Esta misma semana, una nueva pullita se ha colado en plenos rumores sobre el fichaje de Bernardo Silva por el FC Barcelona. Pep Guardiola ha mandado un mensaje de lo que debe hacer el club azulgrana si quiere contratar a Bernardo. "Si lo quisieran, cogerían un avión, vendrían aquí y hablarían con nuestro director deportivo o nuestro CEO", confesó el de Santpedor, dejando claro que, hablar con los jugadores no es suficiente.
Recado o no, los indicios acerca de las crecientes tiranteces entre Guardiola y Xavi se acercan a la evidencia. Incluso tienen un mediador ofrecido voluntariamente para solucionar la batalla, Joan Laporta. El presidente azulgrana habló al respecto en TV3 y dijo que era "responsabilidad suya" el solucionar cualquier atisbo "malrollero" entre los dos referentes del barcelonismo.