El Barça de basket responde con un primer golpe en la final de la Liga ACB. Los azulgranas se apoyaron en la afición presente en el Palau Blaugrana para arrancar con el pie derecho (97-88) la serie contra el Real Madrid. El juego de los culés fue bastante coral, teniendo que remar como colectivo ante el buen comienzo de partido de su rival. En ese grupo tan unido sobresalió la figura de Nikola Mirotic, que ha estado envuelto en la noticia de su salida del club y ahora busca despedirse con un título importante bajo el brazo.
Un clásico intenso
Los dos equipos no se reservaron en lo más mínimo durante el comienzo del encuentro. El elenco merengue tuvo un poco más de contundencia en los primeros minutos, lo que les permitió armar una ventaja inmediata (4-12), pero los ajustes defensivos de Jasikevicius y la precisión de un fantástico Sertac Sanli impidieron que la situación se complicara demasiado. El pívot turco estuvo letal desde el perímetro con cuatro intentos exitosos de cinco.
Nikola Kalinic protege el balón ante la marca de Rudy Fernández y Tavares / EFE
El compromiso fue, hasta el descanso, un intercambio de golpes. El Real Madrid logró llevarse una pequeña ventaja (47-50) al terminar el segundo cuarto, pero el Barça estaba demostrando que podía seguir creciendo con el pasar de la noche. La diferencia hasta ese momento fue que los merengues se beneficiaron de los tiros libres anotados, mientras que los azulgranas no tuvieron oportunidad desde ese punto del tabloncillo.
El Palau ruge
La tensión fue creciendo con el pasar de los minutos. Poco a poco el Barça fue inclinando la balanza a su favor, especialmente con un Laprovíttola que despertó en el momento preciso para voltear el marcador. Sus triples permitieron igualar las acciones y después Da Silva se encargó de poner en ventaja definitiva a los suyos. Un tramo de partido (63-60) que dejaba todo abierto para el último cuarto de la noche.
El espectacular mate de Da Silva, durante el triunfo del Barça contra el Real Madrid / FCB
Los triples fueron apareciendo con más frecuencia para el equipo de Jasikevicius, siendo en este caso Mirotic, Abrines y Satoransky los principales protagonistas. Del lado merengue siguieron insistiendo con evitar que la distancia se fuera ampliando a partir de la figura de Sergio Rodríguez. Pero ante cada punto apareció la respuesta de Mirotic y compañía para sellar el primer triunfo de la final de la ACB.
El siguiente encuentro será nuevamente en el Palau Blaugrana el domingo 18 de junio (18:30 horas). Los azulgranas quieren otro triunfo en casa antes de visitar el feudo merengue y así dejar tocado a su rival más importante en el panorama nacional.