Riquelme, Di María y la inquina de Messi hacia Van Gaal

Leo Messi pasó factura a Louis van Gaal tras la victoria, en la tanda de penaltis, de Argentina ante Países Bajos. Y sorprendió el malestar del delantero del PSG con el exentrenador del Barça.

En los cuartos de final del Mundial, Messi celebró efusivamente sus goles. Y se acordó de Van Gaal. Leo festejó un gol de Argentina haciendo el topo gigio, mirando al técnico neerlandés, el gesto favorito de Riquelme. El exfutbolista que nunca tuvo buena sintonía con el actual seleccionador de Países Bajos cuando ambos coincidieron en el Barça.

Di María y el United

Después del partido, Messi cargó contra Van Gaal. “No me gusta que se hable antes de los partidos. Eso no es parte del fútbol. Yo siempre respeto a todo el mundo, pero me gusta que me respeten a mí también. Van Gaal no fue respetuoso con nosotros”, manifestó el futbolista argentino.

Messi tampoco ha perdonado a Van Gaal que le criticara tras una semifinal de 2014. "Messi no tocó el balón ese día", comentó años después Van Gaal. Pero el exdelantero del Barça está especialmente dolido con el técnico por el trato que le dispensó a Di María en el Manchester United.

La crítica de Van Gaal

"Es el peor técnico que he tenido en mi vida. Hacía dos goles y al día siguiente me mercaba todo lo que había hecho mal", recordó recientemente Di María, amigo personal de Messi.

En las horas previas al partido entre Holanda y Argentina, Van Gaal también cuestionó el liderazgo de Messi en la selección albiceleste y dijo: “Cuando Argentina pierde el balónm Messi no participa mucho, eso nos da oportunidades”. 

Davids interviene

Van Gaal, además, había asegurado que Países Bajos se clasificaría para las semifinales si el partido terminaba en empate y se decidía en los penaltis. "Si llegamos a la tanda, ganamos seguro", manifestó el seleccionador neerlandés. Messi marcó dos. Uno durante el tiempo reglamentario y otro en la tanda.

Eufórico por la victoria, Messi se dirigió a Van Gaal al acabar el partido. No se supo qué le dijo, pero Edgard Davids, ayudante del seleccionador, tuvo que intervenir para calmar los ánimos.