Partido de mucha intensidad el que se avecina en el Mundial de Qatar. La selección de España se enfrentará (6 de diciembre, 16:00 horas) a Marruecos por un boleto a los cuartos de final de la cita mundialista. Dicho compromiso ha sido catalogado como de alto riesgo, debido a la aglomeración que se va a dar en la ciudad de Barcelona entre las aficiones de los combinados.
Ante ese escenario, los Mossos d'Esquadra han diseñado un fuerte dispositivo para la ciudad a partir de la recomendación del Ministerio del Interior y la Conselleria de Interior de la Generalitat. Las mencionadas entidades enviaron circulares a las diferentes jefaturas de policía en donde existe una mayor presencia de la población marroquí, como puede ser el caso de L'Hospitalet de Llobregat, Badalona, Mataró, etc.
Según ha detallado La Vanguardia, la jornada en Barcelona se seguirá desde el Cecor, el centro de coordinación policial, que se instalará en las dependencias policiales de la calle Bolívia y en la que habrá responsables de todos los servicios de emergencias que intervendrán durante el dispositivo, desde ambulancias hasta bomberos, en caso de un panorama de descontrol. El peor de los escenarios es que Marruecos obtenga la victoria, lo que podría provocar una ola masiva de aficionados en varios puntos de la ciudad.
El antecedente en Bélgica
Uno de los motivos que ha preocupado a las autoridades de Barcelona es el antecedente en el territorio belga, en donde los aficionados marroquíes salieron a las calles a festejar la histórica victoria contra Bélgica en la segunda jornada de la fase de grupos. Dicha celebración se salió de control, a tal punto que por el camino se registraron una enorme cantidad de destrozos de establecimientos y mobiliario urbano.
La policía de Bélgica terminó interviniendo con fuerza a partir de esa situación, lo que provocó una batalla entre las dos partes. Las mencionadas autoridades utilizaron gas lacrimógeno y dos cañones de agua para tranquilizar el caos vivido en Bruselas, aunque también otras ciudades vivieron una alta tensión por el choque de las dos aficiones. En tan solo dos horas se contabilizaron más de 20 detenidos.
Un hecho que preocupa enormemente a los responsables policiales de Barcelona, en lo que promete ser un partido de alta tensión entre la Roja y el conjunto de África del Norte.