En el París Sant Germain ya se preparan para lo inevitable. Una de sus grandes estrellas, Neymar Jr, ya mostró de forma pública el verano pasado su intención de dejar el equipo de la capital francesa. Aunque finalmente su traspaso al Barça no pudo acabar de concretarse, el brasileño se quedó con total desgana y sin duda, volverá a intentar que su equipo le abra la puerta la próxima temporada.
De hecho, el delantero, cuando las lesiones se lo están permitiendo, está volviendo a demostrar que es un jugador decisivo. Ya suma seis goles en ocho partidos en la Liga Francesa. Sin embargo, su carácter siempre le pierde. Y Neymar no está dudando en encararse a sus propios aficionados cada vez que ve puerta con la elástica parisina.
Así, parece que se trata de una situación con un único camino posible: la salida, más pronto que tarde, de Neymar del PSG. Y la secretaría técnica del club ya se prepara de cara a encontrar un jugador de garantías que ocupe su puesto.
Que tiemble el Liverpool
Así, el PSG ya tiene en su punto de mira al futbolista que sustituiría a Neymar, en el hipotético caso de que el brasileño finalmente se marchase. Se trata del extremo del Liverpool, Sadio Mané, cuarto clasificado del último Balón de Oro.
Precisamente fue el medio que organiza anualmente el premio, France Football, el que avanzó que el senegalés, de 27 años, es el preferido de Leonardo de Araujo, director deportivo del PSG. Sin duda, sería un fichaje de muchas garantías para los franceses.
Mané se ha convertido en uno de los futbolistas más desequilibrantes del mundo, y forma una dupla letal junto al egipcio Mohamed Salah en el equipo inglés. Este curso, en la Premier League, ya suma nueve goles y seis asistencias en solo 15 encuentros.
Tendrán dinero de sobra
Aunque se tratará de una operación difícil, donde el Liverpool no bajaría nunca de los 100 millones de euros antes de sentarse en una mesa, la realidad es que el PSG espera sacar más de 200 millones por la venta de Neymar.
Así, el dinero no será un gran problema para los franceses. El principal inconveniente que se puedan encontrar es ofrecer a Mané un proyecto serio y competitivo. El senegalés es pieza clave en el equipo que lidera con mucha ventaja la Premier y recién campeón de Europa.
Así, no será fácil sacarle de un Liverpool que vive unos años gloriosos, y que decida comprometerse con un equipo donde en los últimos años han predominado las decepciones y las polémicas entre sus estrellas.