Rosa Benito se defiende de las acusaciones de Alessandro Lequio: "A mi familia déjala en paz"

Rosa Benito y Alessandro Lequio están en pie de guerra. A las afirmaciones de la exmujer de Amador Mohedano de que el italiano le daba "pena" porque estaba "muy mayor", Lequio contestó contundente: "Pena debería darle su hija Chayo, que en vez de ponerse la bata de cola para triunfar en un escenario como su tía, está vendiendo braguitas en una web para adultos".

Un tema que no ha gustado nada a Rosa y sobre el que ha querido pronunciarse públicamente en Ya son las ocho. "Si tienes que decirme algo dímelo a mí, a mi familia déjala en paz. Dime a mí hija de la gran…, pero a mi entorno déjalo", ha salido en defensa de su hija. 

Que nadie se meta con Chayo

La colaboradora asegura que ella está en televisión para defenderse, pero que "no se meta con la familia. Los hijos duelen mucho, así que lo que tengas que decir, dímelo a mí". Benito considera que ha sido un comentario de muy mal gusto y que no tiene por qué meter a terceras personas cuando el conflicto va con ella. 

"Creía que tenías un humor un poco más natural", ha reflexionado. Sin embargo, ha aceptado su parte de culpa por dichos comentarios y le ha pedido perdón: "Si te he ofendido, te pido disculpas". Sin embargo, la colaboradora se ha tomado a risa que Lequio se hubiera ofendido por su comentario de la edad. 

Se lo toma a guasa

"A mí me gusta ser mayor, porque eso quiere decir que tengo vida. Lo único que quise decir es que llevábamos mucho tiempo en la tele", ha bromeado. Además, ha optado por tomar la misma actitud sobre otro de sus comentarios: "Sabía que Rosa era una mentirosa que se viste por los pies, pero me he dado cuenta de que es cortita".

"De cortita no tengo nada. Medía 1,73, ahora 1,70 porque con la edad…", ha dicho entre risas Benito. Lo que ha dejado claro es que con ella pueden meterse todo lo que quieran pero que, en el momento en el que se metan con sus polluelos, sacará las garras contra cualquiera.