Las buenas maneras de Jill Biden fallan con Letizia
La primera dama estadounidense llega tarde a su encuentro con la reina de España y comete un garrafal fallo de protocolo
29 junio, 2022 11:43Las jornadas de Jill Biden en Madrid están siendo de lo más ajetreadas. La reina Letizia ejerce de anfitriona perfecta ante los acompañantes de los líderes occidentales que estos días se dan cita en la capital española con motivo de la cumbre de la OTAN.
Minutos después de que Joe Biden, presidente estadounidense, aterrizara en la base de Torrejón de Ardoz (Madrid), su esposa, junto a la monarca española, debía visitar el Centro de Atención, Acogida y Derivación de refugiados ucranianos. Un encuentro al que Jill ha llegado tarde.
Letizia triunfa con su estilismo
A las puertas del centro, Letizia lucía un traje chaqueta blanco, estilo setentero, con blusa en color rosa palo, y salones a juego, con el que ha conquistado a todos los estilistas. Tras varios minutos esperando, Biden ha llegado al lugar con un vestido de flores y gafas de sol, un gesto del que parece que la esposa del mandatario no se ha dado cuenta y que ha sido visto como un garrafal fallo de protocolo. Poco después, se percataba de lo ocurrido y se las quitaba.
A todo ello, en esta ocasión, a la profesora de Literatura la acompañaban sus dos nietas veinteañeras: una de ellas, ataviada con chándal y alpargatas. Sin embargo, si hay algo que ha llamado la atención a los presentes ha sido la reacción de Ortiz a la llegada de Biden. Cuando por fin ha aparecido la primera dama, la monarca ia ha extendido sus brazos, diciendo “por fin”.
Jill Biden se olvida del protocolo
Desde el equipo de Jill Biden han apuntado a los controles de seguridad como motivo del retraso. Finalmente, la esposa de Felipe VI ha recibido a la primera dama con dos cálidos besos, igual que a las dos jóvenes que la acompañaban.
Por si fuera poco, ha sido durante la cena, cuando la estadounidense ha llevado un estilismo muy parecido al que había llevado su anfitriona horas antes. Algo que ha sido visto por los expertos también como una falta de respeto hacia la reina, y sobre todo, como otra patada al protocolo. ¿Cómo te quedas?