En un anuncio que se emitió en los años 90, inaugurando la temporada televisiva de las fiestas navideñas, una chica enfundada en un mono negro inspirado en Catwoman se bajaba de una moto y decía que buscaba a un tal Jacq's, mientras se desabrochaba la cremallera y dejaba ver su escote.
El mítico anuncio de 1994 dirigido por Isabel Coixet fue una secuela de otro estadounidense de 1984. Allí, la modelo estadounidense llevaba un ajustado mono rojo y era Jo Bennett. En España, la modelo catalana Mónica Van Campen le dio vida a la chica guerrera con un mono negro y una moto divina. Su escote ocupó la memoria de toda una generación, y el gesto de bajarse la cremallera y decir “busco a Jaq’s”, un código entre risas. Pero, ¿Qué fue de aquella silueta que todos recuerdan pero nadie volvió a ver?
De buscar a Jacq’s a encontrar su sitio en series de televisión
Cuando se rodó el anuncio de perfume Jacq’s en España, la actriz aún no contaba 20 años y su rostro (mejor dicho, su cuerpo) rondaba todos los televisores de España. “Lo siento, Mónica, pero los de la agencia quieren que te bajes más la cremallera”; según reconoció Isabel Coixet en la Resistencia, “eran tiempos duros y machistas”, en los que se pedían estas cosas sin ningún pudor.
Si bien que aquel escote permitió que Mónica van Campen fuera recordada hasta nuestros días como un mito y seguir cobrando royalties, lo cierto es que también forma parte de los micromachismos que ocupaban nuestro día a día y las pantallas de televisión.
Sin embargo, aquella imagen no determinó su carrera, sino que la actriz (que anteriormente ya había hecho sus pinitos como modelo) apareció en películas tan míticas como Faust (2000), Alas rotas (2002) y Princesas (2005), donde interpreta a una de las prostitutas que se dan cita en la peluquería.
En cuanto a series de televisión, aparece en series tan míticas como La que se avecina, El Comisario, o las catalanas Plats Bruts y La Riera.