Ha pasado poco más de una semana desde que la vida de Tamara Falcó diese un giro de 360 grados: pasó de estar comprometida con Íñigo Onieva a decirle que ni por seis segundos ni por un nanosegundo en el metaverso perdonaría su infidelidad después de que se filtrase un vídeo en el que aparecía besando a otra chica. 

Así las cosas, después de estar unos días desaparecida y reflexionando sobre ello, la marquesa de Griñón ha retomado sus compromisos laborales y, actualmente, se encuentra en México, donde es ponente en la XIV edición del Congreso Mundial de las Familias. Allí Tamara ha contado cómo se encuentra después de la traición de su exprometido.

Lo que siente hacia él

"Ha sido un despertar espantoso, pero al mismo tiempo pienso en el perdón, pienso en la importancia del perdón", ha confesado Falcó. Entonces, ¿estaría dispuesta a perdonar a Onieva? La hija de Isabel Preysler tiene claro lo que siente por él, que no es eso: "No siento odio hacia él ni aberración, me da pena".

No obstante, la joven ha explicado que todavía lo está asimilando, especialmente porque, tal y como contó en El Hormiguero, tuvo que desmontar a la persona con la que estuvo a punto de casarse: "No lo entiendo, no me cabe por la cabeza lo que ha sucedido, pero creo que también él y todos los que están perdidos en las sombras merecen conocer la verdad y el amor de Dios".

El proyecto de Dios para ella

Con todo, la marquesa ha reconocido tener una "mezcla de sensaciones" y ha confesado que en un viaje a Maggiore, Italia, hizo una "oración muy fuerte" sobre su relación: "Rogué muy fuerte que, si mi novio de aquel entonces era para mí, que se realizara, que llegáramos al matrimonio y que, si no, que por favor lo apartara". Y así ha sido.

Lo que ella no se esperaba era que se lo fuese a quitar "delante de la televisión nacional", tal y como bromeó en su programa. "Estaba muy ilusionada con que, aunque no fuera evidente, el proyecto de Dios estaba ahí. Claro, todo esto cambia radicalmente, ya no cuando salen unas imágenes de mi novio en aquel entonces siendo infiel, pero ya no solamente eso, caen muchas más cosas, fue un dominó", ha explicado.