Shea Whigham (Tallahassee, Estados Unidos, 1969) es un reputado actor que se ha hecho un gran nombre en Hollywood como uno de esos secundarios de peso, que roba escenas y que deja impronta. Ahora hace lo propio con su interpretación de Gordon Liddy, el jefe del operativo del entramado del Watergate en Gaslit.

La serie cuenta con Julia Roberts en la producción y Matt Ross como su director, y está coprotagonizado por Sean Penn y Dan Stevens. Una producción que mezcla el humor, el suspense y el relato de los hechos para poner el foco en Martha Mitchell, la esposa del fiscal general John Mitchell, salpicado por el caso que supuso el descalabro de Richard Nixon.

Con motivo de su estreno el pasado 23 de abril en Starzplay, Crónica Directo pudo tener una breve conversación con el intérprete, en la que revela cómo es meterse en la piel de un personaje tan controvertido y el papel de la televisión frente al cine.

--Pregunta: ¿Cómo llegó al proyecto?

--Matt Ross, el director de Captain Fantastic, que es fantástico, y Julia Roberts, con la que trabajé en la serie Homecoming, se acercaron a mí para interpretar el personaje de Gordon Liddy. Les dije que me lo tenía que pensar un poco porque me asustaba meterme en su piel, aunque al final decidí agarrar esta oportunidad.

--Una vez metido en el personaje, ¿cómo lo describiría?

--Liddy es el último mono, hará todo lo que sea necesario por la causa para tratar de ser visto para su rey, el rey Richard Nixon. Lo que quiere es que Nixon lo vea y hará todo por ello.

--¿Cree que todavía existe gente en la política como él?

--Y tanto. Hay gente que incluso lo ven como un corderito.

--¿Es muy difícil meterse en la piel de un personaje de marcado carácter moral y/o amoral com Liddy?

--Es un tema difícil, pero has de encontrar al ser humano. ¿Hay honorabilidad en ese hombre que es visto como insano? Sí. Liddy se pasó 12 o 13 años en una prisión de alta seguridad, cuando Dean y todos a su alrededor se delataron, él se mantuvo allí. Hay una honorabilidad en ese mantenerse. Luego hay que pensar en la importancia que le daba a su familia, un hombre casado por más de 20 años, con cinco hijos. Has de ir por allí, creo.

--¿La serie puede ayudar a recordar a la gente lo que pasó no sólo en el caso Watergate, sino lo que sucede en la política?

--Puede ser, aunque queríamos recontar la historia desde el punto de vista de Martha. Cuando me lo ofrecieron, yo no quería hacer una especie de documental sobre el Watergate. Ya se hizo con Todos los hombres del presidente y a la perfección. No tocaría eso. Esto es lo que los hermanos Coen harían con estas grandes historias de Martha y George, Dean and Betty, qué hizo Liddy con su círculo, eso es lo interesante.

--De hecho, ¿cree que la historia quiso apartar el foco de Martha Mitchell?

--Sí, fue apartada, no querían que saliera y que fuera conocida por esto. Cuando vemos a Julia en esta batalla que lidia Martha no lo puedes creer. Y que Julia se implique en esta historia así fue… y trabajar juntos con Sean Penn te hace pensar.

--¿Cómo fue este trabajo con estos dos grandes actores?

--No trabajé mucho con Julia en esta serie, en la que ella es la productora, aunque me dio dos de mis mejores papeles de mi carrera en Homecoming y aquí. Y con Sean… he trabajado con él un par de veces, pero yo tenía su póster en la habitación, quería caminar como él, hacerlo todo como él. Estar con ellos en el escenario es increíble.

--Como bien dice, ahora está haciendo muchas series. ¿Qué opinión tiene al respecto, cree que sólo es un boom o no?

--Las series son una gran forma de contar historias. Yo hice Broadwalk Empire y pude hacer mi personaje durante cinco temporadas con todo lo que puedes darle. Piensa que con un director como Matt Ross, nominado al Oscar por Captain Fantastic, o Terence Winter, que escribió en El lobo de Wall Street con Scorsese, hay una conjunción. Julia y Sean hacen televisión. No hemos de tener miedo a la televisión. Amo la manera de contar una historia durante varias temporadas.

--¿Pero no es peligroso para el cine?

--Eso hemos de verlo. Yo sigo yendo. Con la pandemia se movió todo de sitio. Pero si construyes una buena historia, la gente siempre la descubrirá allí donde esté.