Camilo Blanes ha recuperado su vida normal tras salir del hospital en el que estuvo ingresado tras su cumpleaños. El problema es que muchos temen que ese regreso a la normalidad, en su caso pueda suponer también una recaída.
Las últimas imágenes que el hijo de Camilo Sesto ha subido a sus redes preocupan a todos. Con una cara mucho más delgada, en plena noche, ha lanzado unos versos, cuyo contenido preocupan.
Se teme lo peor
"Tengo la intención de traer el cielo a la tierra, liberar a todos de la esclavitud para el beneficio de todos. Tengo la experiencia de la edad y puedo intentar llevar mi presión como incentivo en tu nombre, mi nombre, hijo de puta", decía a la cámara en un inglés.
Tanto las palabras, pero sobre todo su aspecto, muy desmejorado, hicieron saltar todas las alarmas. ¿Ha vuelto a recaer Camilo en las drogas y alcohol?, se preguntan muchos. Desde que compartió en redes sociales las preocupantes e incoherentes imágenes que han activado las alarmas sobre una posible recaída, él no se ha dejado ver.
Lourdes Ornelas
La madre de Camilín, Lourdes Ornelas, que intenta no separarse de él, no puede estar más preocupada. “Me llevé una desagradable sorpresa al verle así. Me había prometido que iba a llevar una vida normal, que se acabaron los errores del pasado. Estoy muy dolida… Ya no sé qué hacer”, lamenta a La Razón.
Ella lo tiene claro, “lo más recomendable es que ingresara en un centro de desintoxicación, pero nadie puede obligarle a entrar, si no es por propia voluntad. Ya he dicho en otras ocasiones que, cuando vivíamos en México, y se repetían estas situaciones, conseguía ingresarle, pero en España es distinto que allí…”, matiza.
Llamada de auxilio
Ornelas no puede más. Intenta no exponer su dolor públicamente, guardar silencio ante las cámaras y los periodistas, pero la situación de su hijo es superior a ella, “muy dura”. “Camilo necesita ayuda de especialistas, él solo no puede salir adelante”, asevera.
“Mi hijo me dice que va a poder curarse por sí mismo, no entiende que necesita apoyo profesional. Hay días que no se puede controlar y cae de nuevo”, señala al citado medio. Lo único que le queda es la esperanza. “Confío en que mi hijo recapacite, que entienda que no puede seguir así y que busque esa ayuda profesional. Por su bien y el de todos”, sentencia.