Primero fue la eliminación de Sálvame Tomate. Telecinco lo cambió por Alta Tensión y tras su fracaso puso al frente de la franja de 20 a 21 horas a Sonsoles Ónega. Luego llegó el Lemon Tea de 16 a 17 horas. Y el próximo 28 de octubre pierde una nueva hora. ¿Es el fin de Sálvame?
La cadena no ha dejado de dar campanazos sobre el mítico programa de sobremesa. Este mismo jueves saltaban dos noticias al respecto. Por un lado, Carlota Corredera abandona como presentadora para tener un nuevo espacio. Por otro, Belén Esteban estrena el próximo lunes Lo de Belén.
La cúpula
Estos no son los únicos cambios. Pese a que estos días todavía se ve a David Valldeperas y a Alberto Díaz detrás de las cámaras, la cúpula de Mediaset ha decidido sustituirles y poner al frente al máximo responsable de La fábrica de la tele, Óscar Cornejo.
Las audiencias son el principal motivo que han obligado a tomar medidas tan drásticas. Los números no cuadran. La franja horaria de las 16h a las 20h ya no es tan atractiva para los anunciantes ni para los espectadores, que apuestan por las novelas.
Vaticinios
La competencia ya se frota las manos ante el cambio de rumbo. No es la única. Antonio David Flores no ha querido perder la oportunidad de buscar protagonismo y recordar que estos anuncios se producen justo un año después de su despido y el estreno del documental de Rocío Carrasco.
El exguardia civil está eufórico con la noticia. Asegura que esto “es la punta del iceberg” y que estos cambios se pueden traducir en el fin del programa si la audiencia no responde. Son varios los medios que defienden ya esta tesis. ¿Se hará realidad?