Ana María Aldón y José Ortega Cano no están pasando por el mejor momento de su matrimonio. A pesar de los numerosos rumores que apuntaban a que el torero estaba descuidando la relación con la gaditana, era ella misma la que, en Viva la vida, aseguraba que no había divorcio a la vista.
"Yo entiendo que él quiera mucho a Rocío Jurado, pero ella lamentablemente es una persona que ya no está aquí y yo sí que estoy, y merezco la pena, yo también tengo cosas buenas", replicaba la colaboradora. Sin embargo, la pareja ha decidido ahuyentar cualquier comentario negativo sobre ellos.
Romántica escapada
Concretamente, ha sido Aldón la que ha publicado una imagen en su perfil de Instagram junto a su marido de lo más sonrientes y enamorados. "Maravilloso el día de ayer en el cortijo", escribía junto a la publicación. Al parecer, el matrimonio ha pasado el fin de semana en Sevilla para acudir al bautizo de unos amigos.
Junto al pequeño José María, los tres han puesto tierra de por medio en todo este drama y han disfrutado de esta celebración: "Enhorabuena a nuestros amigos Mariano y Ángela por el bautismo de su pequeña Ana Patricia. Gracias de todo corazón por hacernos partícipe de este día tan importante".
Golpe sobre la mesa
Con esta imagen, la exconcursante de Supervivientes da un golpe sobre la mesa y zanja así cualquier rumor de crisis. Era ella misma la que le confesaba a Emma García que estaba "enamorada" del torero, algo que queda latente con esta imagen en la que posan con sus vestidos de gala de lo más acaramelados.
Es más, por si quedaba alguna duda, Ana María ha publicado también la misma fotografía en la sección de historias junto a la canción de Rozalén, Vivir. La letra ha sido determinante para saber que la gaditana está dispuesta a luchar por su amor: "Y si miro todo como un niño, los colores son intensos. Yo saldré de aquí, sí, lo creo así. Cuando me miren, sabrán que me toca ser feliz".