José Ortega Cano cumplió ayer 68 años en uno de los momentos más agridulces de su vida. El torero se ha posicionado en el ojo del huracán durante este último año a raíz de la emisión de la serie documental Rocío, contar la verdad para seguir viva. Un duro testimonio de parte de Rocío Carrasco que no le ha dejado indiferente.
A eso hay que sumarle su delicado estado de salud, pues este verano se ha tenido que someter a un cateterismo que lo ha mantenido alejado de televisión durante un tiempo. Por si fuera poco, diversas crisis matrimoniales lo han azotado este año con Ana María Aldón.
José Fernando, presente
Sin embargo, todas estas polémicas no le han impedido celebrar su cumpleaños como él quería: arropado de toda su familia. El torero entró en directo en Ya son las ocho, el programa en el que trabaja su hija, Gloria Camila, para desvelar cómo había pasado esta fecha tan señalada a vísperas de Nochebuena.
"Estamos los justos, porque el tema del virus hay que tomarlo muy en serio. Estamos pocos, pero contento. Están mis tres hijos", ha revelado. Estas declaraciones desvelan, entonces, que su hijo, José Fernando, que lleva un tiempo ingresado en un centro psiquiátrico, saldrá para pasar el cumpleaños de su padre y las Navidades con su familia.
El mejor regalo
"Sí, él está con nosotros. Hacía ya tres años que no venía y estamos muy contentos todos", ha confesado el diestro. Respecto a como se encuentra su hijo, Ortega Cano admite que "está muy tranquilo y muy bien". Algo que preocupaba después de la polémica que generó su pareja, Michu, recientemente sobre su posible boda.
Con todo, el difunto de la Jurado ha querido matizar que él va a visitar a su hijo "todas las semanas". De hecho, asegura que "toda la familia lo ve porque nos vamos turnando". Desde luego, poder reunir a toda su familia en estas fechas es el mejor regalo que José Ortega Cano podría tener.