Carlos Marín, fallecido este 19 de diciembre a los 53 años a causa del Covid, era el único miembro español de Il Divo. Aunque nacido en Alemania, el cantante vivió en España y tenía una casa en Madrid, cerca del Manzanares.
La vivienda no era una gran casa, sino un ático situado dentro de un bloque con piscina comunitaria ubicado en la mítica Puerta de Toledo de la capital. Un piso que contaba además con una terraza privada de 100 metros cuadrados.
Comedor
El artista no tuvo inconveniente en mostrar su casa a sus fans en más de una ocasión. La última hace escasos meses, antes de iniciar su nueva gira con la banda.
El inmueble era relativamente modesto. Con un pequeño salón con un ventanal exterior y equipado con un sillón de asientos reclinables. Y velas, muchas velas y una fuente de agua, como dicta el Feng Shui.
Decoración y cocina
Otra de las características más destacadas era su decoración. Entre los objetos que adornan la casa se encontraban desde pequeñas esculturas budistas, hasta amatistas y figuras africanas que se hizo traer de Sudáfrica.
La cocina es algo más estrecha, pero con un espacio de comedor, con una mesa donde solía comer cuando estaba sólo. En esa zona, incluso se llegó a poner un mueble del dormitorio.
Dormitorio
Precisamente, su habitación tipo suite era una de las zonas más queridas por Marín. Allí, la cama reclinable estaba rodeada de dos cómodas. Una con velas, la otra con un pequeño altar con medallas, la Biblia, una cruz bendecida por el Papa Francisco y otros detalles.
Otro de los detalles que destaca en el dormitorio es un pequeño corcho colgado de la pared con papeles de sus planes para el año y otros deseos. Como el de ganar 10 millones de dólares o una imagen de Frank Sinatra, artista en el que él se espejaba.
Gimnasio y música
El gimnasio era, sin duda, su parte favorita. Convirtió una habitación exterior en una sala donde puso todas las máquinas de cardio que pudo. “Quieras o no, la imagen de Il Divo siempre ha sido la de unos hombres con sus trajes de Armani y bien cuidados”, subraya.
Y para el momento musical, se ha hecho un entrepiso elevado donde tiene ubicado un piano donde toca en sus momentos de máxima creación. Y es que, el cantante había sacado recientemente su primer disco en solitario. Allí además tenía una guitarra de Barbra Streisand firmada por ella.