Fredi Leis es uno de los artistas emergentes del panorama musical español. Un cantante que escribe sus propios temas y que ha colaborado con artistas de la talla de Dani Fernández, Álvaro de Luna y Cami.
En 2018 también formó parte del reparto de la película La sombra de la ley, con actores de renombre como Luis Tosar, Michelle Jenner, Vicente Romero, Ernesto Alterio, Paco Tous y Manolo Solo.
Momento vital
Tras publicar Portobello y Nivel experta de la mano de Warner Music, el compositor presenta Déjà vu, una canción que abre el camino al nuevo disco que saldrá en 2022. Un grupo de canciones inéditas compuestas durante estos últimos dos años alrededor de un momento vital diferente y especial para el artista.
Después de un año sin sacar música en solitario, el artista asegura que ha estado trabajando duro por lanzar un proyecto completo. "Eso supone reflexionar, vivir, componer mucho, tirar canciones a la basura y volver a empezar", desvela Fredi Leis en una entrevista con Crónica Directo.
--Llevaba un año sin sacar canción en solitario. ¿Por qué?
--La razón principal es tratar de estar a la altura de lo que uno se exige a uno mismo. En mi caso, quería hacer un disco completo, no sacar simplemente singles de forma continuada con alguna especie de calendario marcado. Eso supone reflexionar, vivir, componer mucho, tirar canciones a la basura y volver a empezar. Ese ha sido el período de mi vida en el que he estado últimamente. Ha sido un periodo muy creativo. Después de todo eso, estoy con ganas de volver a los directos en 2022, arrancaremos gira a finales de abril, y seguir compaginando eso con la composición de los temas que saldrán después del álbum también.
--Aunque no haya sacado música, no ha dejado de trabajar.
--Sí. El problema, entre comillas, de la música es que pasas largos períodos de trabajar en la sombra, sin sacar nada a la luz. Hay gente que se cree que estás por ahí viajando, viviendo la vida, y en muchas ocasiones es todo lo contrario. Componer canciones que realmente reflejen lo que quieres transmitir, no salen todos los días. Pero sí que hay que sentarse todos los días para que esto pase.
--¿Cómo nace ‘Déjà vu’?
--Nace durante el confinamiento, las canciones del nuevo disco están compuestas en el último año y medio y describen este momento vital y lo que estoy sintiendo hoy. Quería crear mucho contraste entre la estrofa y el estribillo. La canción habla del momento en el que tienes que tomar la decisión de cortar la relación con alguien y que, a veces, no es tan fácil. Una cosa es decírtelo a ti mismo y otra cosa es llevarlo a cabo. Te das cuenta de que ganas en algunas cosas, pero pierdes en otras. Cortar una relación y dejar de ver a alguien a quien quieres, lógicamente, no es tan fácil y te hace perder un poco de equilibrio. La estrofa habla de tirar para adelante, de poder con todo. Sin embargo, en el estribillo aparece ella y todo lo que pensabas en la estrofa se va al garete y vuelves a caer. Tiene que ver con esas dificultades que a veces tenemos los seres humanos para llevar las relaciones entre nosotros.
--¿Cuánto tiempo lleva trabajando?
--Todo el disco está compuesto durante la pandemia, en una época dura para todos mentalmente. Y eso creo que se refleja también, no en todas, pero en algunas canciones. De hecho, si no hubiese habido una pandemia mundial, el álbum hubiese sido otro y ya hubiese salido. Pero me parecía coherente y justo reescribir todo eso y hablar de cosas que he sentido en el último año. Todas las canciones hablan de cosas que todos hemos vivido en este último año y medio, hablan de sentimientos bonitos y sentimientos no tan bonitos. Creo que mi obligación como persona que se dedica a hacer música es contar lo que a mí me pasa y tratar de transmitir eso a alguien para que le pueda servir de ayuda o de desahogo.
--Un proyecto arriesgado ahora que no venden tanto los discos. ¿Por qué apostar por uno?
--Principalmente porque creo en el formato y creo que como seres humanos pasamos por diferentes momentos, estados de ánimo y momentos vitales. Los momentos vitales son clave en las decisiones que tomamos para bien y para mal, y un disco debe quedar como una fotografía de un momento determinado de tu vida. En este caso, este álbum son 10 canciones que describen este momento de mi vida. Y dentro de dos años o tres años saldrá otro que explicará lo que sienta en ese momento. Ojalá el formato disco se mantenga de la forma que sea. Entiendo que por cómo está montado todo, el consumo de lo digital sea más fácil e instantáneo. Tampoco quiere decir que, porque tengas la capacidad de tener un mayor número de canciones, vayan a ser mejores o vayan a gustar más. Creo que mi obligación es tratar de mantener un poquito ese romanticismo con el formato disco y al englobar hacer obras redondas y completas.
--Los últimos temas que sacó fueron ‘Nivel experta’ y ‘Portobello’. ¿Entrarán en el disco?
--Sí. Primero, musicalmente, tienen algunos rasgos similares al resto de temas compuestos posteriormente. Y además creo que se merecen también ese espacio porque forman parte de algo importante para mí. Para mí hacer un disco es como hacer un equipo de, en este caso, 10 jugadores o jugadoras, que van a ser 10 canciones, y creo que tiene que estar compensado para que funcione bien. Tiene que haber canciones que metan goles, algunas que defiendan y otras que den pases de gol. Lógicamente, tengo mis preferidas a las que les daría el brazalete de capitán, pero de todas estoy muy satisfecho.
--¿Cómo va a ser el sonido?
--Todas comparten un sonido bastante puro. Independientemente de que haya más instrumentos o menos en la mezcla final, creo que todos suenan muy puros. No está el sonido ultraprocesado. La guitarra es una guitarra acústica, como podría sonar en la maqueta, un piano de pared con una cadencia determinada muy puro. La formación que está sonando en el disco es muy pop británico de los 2000.
--¿Qué tipo de artista quiere ser?
--Aunque parezca una tontería, hoy ya no lo es, y quiero que se me conozca por mi música. No por nada más. No me estoy metiendo con nadie, pero no quiero que se me conozca por hacer un baile en una red social o por otro tipo de cosas. Quiero que mis canciones hablen por ellas mismas y que sea la gente la que las mueva. Que una persona la escuche, le emocione y la quiera compartir. Me gustaría que todo pasase con base en la música. Para mí el objetivo de hacer un disco no es solo sacar todo lo bueno y lo malo que uno lleva dentro, sino luego ese momento de fiesta que es un concierto con la gente, compartir y que haya un intercambio de energía.
--¿Cómo enfoca los conciertos?
--La idea que tenemos es transmitir de la mejor manera posible lo que va a sonar en el disco. Siempre me ha gustado mucho llegar a los directos y sorprender, que la gente forme parte del concierto y sea un integrante más de la banda. El objetivo principal es que toda persona que venga al concierto disfrute, ya sea dando saltos o emocionándose y llorando con una canción.
--¿Cómo vivió la época sin poder dar conciertos?
--Fue un poco complicado. De hecho, por eso hubo todo este este boom de conciertos delante de las pantallas de los teléfonos móviles y a través de plataformas. Eso lógicamente viene de la necesidad de vernos, aunque sea a través de una pantalla, de compartir y de contarnos cosas. La única forma de superar eso fue encerrándome en el estudio, componiendo y pensando que todo ese trabajo se iba a ver recompensado el año siguiente y en la nueva gira.
--¿Cómo valora su camino hasta llegar a donde está?
--Creo que la palabra principal es: bonito. Bonito con sus cosas, lógicamente. Han sido años de mucho trabajo, pero de aprender mucho, de aprender a disfrutar en el escenario. Creo que eso ha sido lo que más he sacado en limpio. Tengo muchísimo respeto a la música en general, como arte, lo que consigue el poder que tiene la música. Y me considero una persona muy exigente, con lo cual siempre quieres dar lo mejor de ti, componer de la mejor forma posible, hacer las mejores melodías y letras. Al principio recuerdo que me subía al escenario tensionado, pensando en que acabara el concierto porque quería que saliera bien y ya está. Ahora realmente me subo a un escenario y disfruto. Soy como un niño pequeño allí, pegando saltos. Un aprendizaje muy bonito.