Antonio David se estrena en YouTube con amenazas a los "repugnantes" que le han hecho daño

Antonio David Flores ha subido un solo vídeo a su canal de YouTube y ya ha dado titulares. Pero en especial por una entrevista que le ha hecho el periodista Diego Arrabal, quien también tiene su espacio en esta plataforma.

Sin gritos ni sobresaltos, el marido de Olga Moreno ha respondido sin pelos en la lengua sobre su situación actual después de ser despedido de Telecinco. Asegura que llega a fin de mes, pero gracias a sus ahorros.

Descalificaciones

El excolaborador de Sálvame admite sentirse dolido porque hay gente que le ha soltado la mano en momentos muy duros para él. Entiende a los que no le han dicho nada, pero se siente dolido por los que lo han atacado después de que Rocío Carrasco lo tachara de maltratador.

“Son así de falsos, de hipócritas y de repugnantes”, sentencia. “En este mundo donde trabajamos hay muchas puñaladas y el que hoy que te da una palmadita en la espalda mañana te saca el cuchillo para darte por la espalda porque no es capaz de hacerlo por delante, no tienen cojones”, lamenta.

Culpables y aliados

El exguardia civil segura que él no tiene que perdonar nada a nadie, “ellos son los que los tendrá que perdonar alguien y ser juzgados porque a mí me han arruinado la vida”, asegura. El ellos suena muy genérico pero le pone nombre y apellidos.

No habla de sus antiguos compañeros de Sálvame, “ellos no son mis enemigos son los que realmente me han hecho daño, La fábrica de la tele, Óscar Cornejo y Adrián Madrid”. De hecho, contra ellos interpuso ya una demanda por su despido por la cual la productora debe indemnizarle con 82.000 euros.

Amenazas

Al hablar de ellos, la rabia le puede. “Con ellos voy a ir adelante hasta dejarme la última gota de sangre”, amenaza. “El resto tendrá que pasar por el juzgado y darles las explicaciones oportunas a los jueces sobre lo que han dicho en televisión”, apunta.

Mientras la batalla judicial continua, Antoniodá apuesta por las redes sociales para decir la suya. “Necesito que la gente también me oiga sin nadie que te pegue una voz y te diga por aquí no o te diga de qué puedes hablar y de qué no”, señala. Eso sí, no descartar volver a Telecinco, “donde no me veo es trabajando para La fábrica de la tele”, matiza.