Anabel Pantoja no gana para disgustos en la celebración de su boda con Omar Sánchez. Desde que la pareja anunció su enlace, se han ido encontrando obstáculos por el camino que han atrasado y complicado la ceremonia que la sobrina de la tonadillera tanto espera y desea. Y ahora finalmente se ha anulado.
La boda primero se tuvo que posponer por la pandemia del coronavirus, ya que la situación sanitaria no permitía la celebración que ellos deseaban. Más tarde, su padre Bernardo Pantoja confirmó que no iría porque sus complicaciones de movilidad no le permitían desplazarse hasta la isla de La Graciosa.
Más problemas
Por si fuera poco, los ecologistas pusieron pegas hace solo unos meses. Una asociación no ve con buenos ojos que la diseñadora se case en la playa de La Graciosa por el impacto que puede producir en uno de los espacios más protegidos de todo el archipiélago.
La colaboradora de Sálvame luego se tuvo que enfrentar a los reproches de muchos de sus compañeros por no estar invitados al enlace. Además, su tía Isabel Pantoja confirmó que no asistiría al acto a pesar de estar invitada. Y es que la familia atraviesa un momento muy complicado.
Fallecimiento de su abuela
La erupción del volcán de La Palma también puso en peligro la celebración. Y es que la cancelación de algunos vuelos y rutas hacia las islas Canarias puso en duda si los invitados podrían llegar a La Graciosa para acompañar a la pareja en un día tan especial para ellos.
Por si fuera poco, la madre de la tonadillera, doña Ana, ingresó en el hospital en estado grave. Aunque no se conocía mucho sobre el estado de salud, este miércoles la abuela de Anabel ha fallecido, solo dos días antes de su boda. Una noticia que ha destrozado a la influencer, que se mantenía muy unida a ella, y que la ha llevado a cancelar la ceremonia.