Gianmarco Onestini se quedó a las puertas del premio de 200.000 euros de Supervivientes. Olga Moreno se proclamó como ganadora y muchos tildaron al segundo finalista del reality más extremo de Mediaset de “reventado” por no querer felicitar a la victoriosa.
“No me arrepiento de lo que he dicho porque creo que un ganador de Supervivientes tiene que ser una persona altruista, no estratega y que no robe o haga trampas a sus compañeros”. El italiano ha reiterado esta mañana en El Programa del Verano su opinión sobre Olga Moreno.
Mas dardos envenenados
Pero no solamente se ha despachado a gusto de la ganadora del reality, sino que el resto de sus compañeros también han sido víctimas de los ataques del italiano en Telecinco. Omar Sánchez y Alejandro Albalá fueron los archienemigos de Onestini en Honduras y sus palabras sobre ellos han sido de todo menos bonitas.
“Omar es una persona mala. Era súper amigo de Melyssa, Olga y Lara y en cuanto ha podido las ha traicionado con los amuletos por un desayuno”, ha señalado sobre el prometido de Anabel Pantoja. En cuanto a Alejandro Albalá, sus declaraciones han ido por la misma línea: “Alejandro me ha intentado aislar. Eso es ser malo. Siempre iba por detrás, a la espalda, nunca a la cara”.
Se ha quedado a gusto
El concursante del reality ha recordado que sufrió bullying cuando era pequeño, aunque confiesa que lo que pasó en la isla con él y Olga Moreno no se puede equiparar con esa situación: “He pasado un bullying terrible. Era un niño obeso y me han hecho cosas terribles”.
Además, Onestini se ha lamentado una vez más de lo que ocurrió con las votaciones en la final: “Me dolió mucho que los fans de Melyssa y los míos tuviesen problemas en las votaciones”. Sin embargo, el italiano no culpa a la productora del programa: “Yo no critico al programa porque no pueden estar en todo, solo critico la actitud de la persona”. Unas declaraciones que no dejarán indiferente a nadie.