En el octavo Conexión Honduras de Supervivientes 2021, los concursantes se enfrentaron a una nueva prueba de recompensa. Divididos en tres equipos, los supervivientes optaban a comer un buen plato de pasta y disfrutar de una ducha de agua dulce con jabón, pero primero debían completar un puzle.
Los participantes debían superar un obstáculo en la arena, nadar hasta una boya y bucear hasta una cesta que contenía una de las piezas del rompecabezas. Unos bloques que, además, pesaban lo suyo. La presentadora, Lara Álvarez, anunció previamente de la dureza de la prueba, y Sylvia Pantoja lo demostró dando el susto de la noche: "Casi me ahogo".
El mal rato de Sylvia Pantoja
Sylvia Pantoja pasó un mal momento en el agua, tal y como reconoció ella misma, y acabó devolviendo la comida junto a medio mar de Honduras: "He tragado mucha agua. He vomitado lo que había comido hoy. He tragado muchísima agua. No sé nadar, bueno... más o menos me defiendo. Pero bucear no, y casi me ahogaba", confesó o la cantante.
Angustiada, durante la prueba, fue incapaz de alcanzar una cesta que tuvo que abrir Olga Moreno minutos después. Sin embargo, la prima de Isabel Pantoja no se rindió, y recuperó su pieza para completar el rompecabezas. Un esfuerzo que le pasó factura, convirtiéndose en mareo y provocándole el ya mencionado malestar estomacal.
Las recompensas de la prueba
Finalmente, la prueba fue completada en primer lugar por el equipo compuesto por Gianmarco, Omar y Alejandro Albalá, quienes disfrutaron de un suculento plato de espaguetis. Después, al quedar en segundo puesto, Melyssa, Lara y Tom pudieron comerse las sobras mientras Carlos, Sylvia y Olga se conformaron con mirarlo todo desde cerca.
Pero la prueba escondía una segunda recompensa con sorpresa: los ganadores pudieron ducharse durante dos minutos con agua dulce y jabón a disposición, pero bajo la única prohibición de poder lavarse a ellos mismos. Es decir, durante 120 segundos, Gianmarco, Omar y Albalá se fregaron entre ellos para disfrute de sus compañeros y los espectadores, dejando uno de los momentos más cómicos de la edición.