Jaime Urrutia (Madrid, 1958) es un icono de la ciudad. Castizo de pura cepa, defensor de los toros y de la buena música regresa a los escenarios en un concierto este 16 de abril en el Teatro Nuevo Alcalá de su ciudad.
Con este pretexto, Crónica Directo ha tenido ocasión de poder conversar con el excomponente de Gabinete Caligari sobre sus años de trayectoria y los cambios de la capital desde la movida madrileña. Pero también las transformaciones y estado del mundo y del sector musical.
Conciertos y composición
Apasionado de la música, su trabajo, como el de otros músicos, se ha visto afectado por la crisis del Covid. Aun así pudo subirse hasta en cinco ocasiones sobre los escenarios. Pocas para alguien que hace una treintena de recitales al año.
Gran compositor de melodías y letras que han marcado una época, tampoco la pandemia le ha servido para inspirarse. Eso no quita que siga manos a la obra, pero sin presión, con la esperanza de poder sacar un nuevo disco a finales de año. Mientras, su día a día es algo muy tranquilo, lejos de la imagen de los excesos de las estrellas del rock.
--Pregunta: ¿Qué espera del concierto?
--Respuesta: Cuando tocas en Madrid, tu ciudad, vienen tus amigos y familia. Espero que sea una celebración, dar todo y que la gente disfrute de mis canciones, que de eso se trata.
--¿Al ser en Madrid va a tener a algún invitado?
--Lo pensé, pero está todo muy complicado. Yo invitaría a Calamaro o Ariel Rot, pero no. Voy a ir con mi banda y con Francis García, saxofonista de Flamenco y Gabinete. Pero ningún invitado de excepción.
--¿Cómo le afectó la pandemia?
--Tuve que cancelar tres conciertos, pero pude tocar en Avilés, Canarias, Bilbao y este año en El Escorial. De 30 conciertos al año hice cinco. Pero nada, aguantar el tipo y ver qué pasa.
--¿Cree que se ha gestionado bien?
--Algunas, sí; otras, no. Supongo que ha habido fallos. Pero entre salud y economía habrá que primar la salud. Estamos todos mal.
--¿En el concierto mezclará temas nuevos y clásicos?
--Será un compendio de Gabinete Caligari y Jaime Urrutia en solitario.
--¿Cuál es la clave para estar más de 30 años en la música?
--Tener un público fiel que me sigue y le gustan mis canciones. Tampoco es que esté en primera página todos los días y es difícil. También creo que tengo un buen repertorio que a la gente le gusta ver en directo.
Videoclip del tema "¿Dónde estas? de Jaime Urrutia / JAIMEURRUTIA
--Bueno, y la voz y las letras hacen, ¿no?
--La voz es muy particular, sí, y forma parte de la personalidad. Pero las canciones son fundamentales, letra y música. Siempre he tratado de cuidarlas mucho.
--¿Cree que se ha perdido el trabajo en composición?
--Sí, creo que se ha perdido mucho. Yo soy de otra generación y es lógico que la gente moderna quiera diferenciarse del resto de generaciones. Pero eso de poner la radio o la televisión y pensar qué buena canción… hay pocas cosas que me llamen la atención. Bueno, sigo a los clásicos y de mi generación. Calamaro, que es un gran compositor. No sigo mucho la música, de todos modos. Pero uno tiene su forma de escuchar música y es difícil ya meterse en nuevos sonidos.
--A propósito de Calamaro, él colaboró con C. Tangana en su disco. De madrileño a madrileño, ¿qué piensa de él?
--Me fijé en el título, sí. Lo he escuchado muy poco. Me llamó la atención la colaboración con Andrés Calamaro y si Andrés colabora con él supongo que estará bien. Y me gusta el título, es un disco que tengo que escuchar. Tiene buena pinta, me parece.
--¿Cómo ve el cambio de Madrid desde la movida hasta ahora?
--Ha cambiado Madrid y todo. No tiene nada que ver este Madrid con el de los 80. Fue una generación que nos encontramos con unas libertades… Todo el mundo quería hacer algo, salías todas las noches sin parar. Ahora cuando salgo me parece todo completamente distinto. El mundo se ha convertido en algo mucho más cerrado y carca. Lo de la movida fue muy especial. Pero todo se ha convertido en algo más aburrido, al margen del Covid.
--¿Cree que el concepto de la movida se ha convertido en un icono vacío?
--Sí, todo el mundo me pregunta por la movida y habla de forma despectiva o sobrevalorada. Pero fue un movimiento social, no solo entre los artistas y los jóvenes. Había cosas muy malas también, sí. Las drogas no fueron buenas, pero había que convivir con ello. También se habla mal de la movida porque todo el mundo sacaba un disco y había grupos malísimos y muy promocionados. Pero yo me quedo con lo que viví. A mí con Gabinete Caligari me fue bien y hablo desde mi punto de vista. En siete años, pasamos de no ser unos neófitos en la música, de no saber nada, a tocar en espacios de más de 50.000 personas. Todo fue muy rápido. Uno, de la movida solo puede hablar bien, por eso hablo con nostalgia y con cariño.
--¿Cree que también había más libertad con las letras?
--Sí, claro. Siniestro Total decía cosas muy bestias con sentido del humor. También ahora, las redes sociales tienen su punto muy negativo. Dices cualquier cosa y te critica todo el mundo. La sociedad ha cambiado totalmente. Estamos en un nuevo puritanismo.
--¿Esto y el Covid le ha hecho crear más?
--No, estoy bastante tranquilo. No tengo una época de inspiración especialmente, pero no me olvido de la historia. Mi ilusión es sacar un disco cuando pase todo esto. Tampoco estoy todos los días con la guitarra y obsesionado. La pandemia tampoco ha inspirado para nada, pero me parece bien lo que haga la gente, hay quien ha hecho directos desde su casa, se graban, pero yo no soy de hablar con la gente a través de un ordenador.
--¿Cómo se lleva con las redes?
--No me llevo prácticamente. Tengo un Facebook que me llevan para promocionar mis actuaciones, el resto no las tengo. También es cierto que las redes sirven para hacer miles de cosas y promocionarse, pero se han convertido en un basurero de insultos que no sirve para nada.
--¿También ahora se sacan más singles que álbumes conceptuales?
--No tenía por qué serlo, pero me parece normal porque ya nadie escucha un LP. Es una cosa a la que nos iremos acostumbrando, hay que aceptarlo. Pero todo, las discográficas también van cerrando. A mí alguna vez me han dicho que es mejor sacar un single que todo un álbum. Los tiempos cambian, no se venden discos o se venden de otra forma.
--¿Cuáles son sus referentes?
--Aprendí a tocar la guitarra con David Bowie, los Beatles, los Rolling Stones, Jim Morrison y Lou Reed. En los 70 y 80 me llevaron a los Clash, los Ramones… Tengo miles de referentes que para mí eran mejores de lo que hay ahora.
--¿Y que gente cree que ha podido seguir su estela?
--No sé. Los Rodríguez, por ejemplo. Ellos mismos lo reconocieron. Incluso alguna vez los pillamos con la oreja en la puerta. Pero de ahora no te puedo decir mucho porque no escucho tanto.
--La pregunta es obligada y lo ha mencionado en diversas ocasiones durante la entrevista: ¿sigue siendo imposible que vuelva Gabinete Caligari?
--Sí. La relación apenas existe. Pero siempre digo que todos tenemos un precio. Claro que Gabinete éramos muy serios. Y sería también una fantasía de querer llenar dos días el WiZink Center. Pero el grupo hizo su carrera y cuando llegó la separación ya había llegado la decadencia. Llevábamos 18 años… y cuando en el grupo deja de existir algo es mejor dejarlo. Pero nunca se puede decir de este agua no beberé.
--¿Y proyectos de libros?
--Hice Canciones para enmarcar porque la editorial Larousse me hizo una propuesta a raíz de la sección que teníamos junto con Ariel Rot en La ventana, pero no soy escritor de libros. Me estoy dedicando más a hacer las canciones de mi próximo disco.