Jorge Javier Vázquez está desesperado con la pandemia. Defiende que se cumplan las normas a rajatabla y espera, como todo el mundo, que la normalidad llegue cuánto antes. De hecho, ya tiene unos cuantos planes de futuro.
Durante el cerca de un año que ha pasado desde que se decretara el primer estado de alarma y el confinamiento total del país, el presentador ha trabajado más que nunca. Sólo hizo una pequeña escapa en verano a un hotel conocido por sus tratamientos de belleza. Pero él quiere más.
Sodoma con Vox
El catalán ha expresado en diversas ocasiones cuáles son sus deseos, pero cada vez va más allá. Este lunes, sin ir más lejos, confiesa en Lecturas que “ojalá España se convierta en una sucursal de Sodoma y Gomorra”.
Su particular fantasía no se queda allí, espera que, en esta nueva situación del país, Santiago Abascal se convierta en “su aparcacoches y Macarena Olona en la señora de la guardarropía”. Y todo porque ha leído que “tras la pandemia se producirá una réplica de los felices años veinte donde triunfarán las ganas de vivir y el gusto por el sexo”.
Trogloditas y 8M
Al margen de su idea de lo que fue la citada década del siglo XX, espera que se produzca un cambio y se entierre “el trogloditismo ideológico que ha nacido al amparo de una época tan complicada”, señala.
Con estas palabras, el presentador zanja una reflexión personal en el 8M, Día Internacional de la Mujer. En la que ha recordado una anécdota familiar que sentencia con una exclamación: “¡Qué cosas han tenido que aguantar las mujeres y qué poco se han quejado!”
Peligros de la ultraderecha
"Gracias a ellas somos más libres, más solidarios, más modernos. En este país ha abundado durante muchísimos años el hombre heterosexual cafre y machista", asegura. Aun así, lamenta que en olos últimos años haya grupos políticos que apuesten por el retroceso de libertades y derechos.
El de Badalona apunta a que "hubo una época" en la que el país "parecía que intentaba reciclarse" de ese machismo, "pero ahora ha venido la ultraderecha a susurrarle que se estaba amariconando y el hombre de pelo en pecho portador de valores eternos resurge de su podrido discurso para emponzoñar el ambiente", sentencia.