Si tuviéramos que hacer una lista de famosos que se atreven a desafiar las leyes de censura de Instagram seguramente no terminaríamos nunca. Y es que la lista no para de crecer, puesto que cada día son más los que se unen a la tendencia de quitárselo todo y posar tal y como Dios los trajo al mundo.

La última en hacerlo ha sido la modelo española de tallas grandes, Marisa Jara, quien ha revolucionado las redes sociales fotografiándose delante del espejo, embutida en un tanga de lo más escueto, tanto que casi ni se aprecia. ¿Aún no has visto la foto?

Marisa Jara y su tanga de hilo dental

La maniquí sevillana de tallas grandes lleva 24 años en el mundo de la moda y, si de algo entiende, es de posar. Por ese motivo, y aprovechando que estaba en el gimnasio más sudada que nunca, la modelo decidió quitárselo todo e inmortalizar el momento con una explosiva fotografía. Una captura en la que Jara sale luciendo un tremendo sujetador push-up en color carne y un escueto tanga negro, que dejan sus dos nalgas totalmente al descubierto. "Selfies de gym", ha escrito la andaluza junto con la captura de la que todo el mundo habla.

Una fotografía que acumula más de 4.000 me gusta y cientos de comentarios de sus seguidores. Entre todo lo que le han dicho, hay cosas tan sonadas como estas: "Tremendo, no me gusta nada!!! Exagerado"; "Me pones muchísimo Marisa, no puede subir estas fotos"; "Más quisieran las Kardashian guapa" ;"Fotón y el culo top" o "Marisa estás más buena que el pan". Unos comentarios a los que la sevillana no ha respondido, y eso que muchos de sus seguidores le han pedido cuáles son los ejercicios que hace para tener un culo tan bien puesto y unas nalgas tan grandes. ¿Desvelará su secreto?

Marisa Jara y su lucha contra el cáncer

No solo fotografías en casi pelota picada es lo que comparte la maniquí en sus redes sociales, sino que también comparte publicaciones de lo más sensibles y cargadas de sentimientos. El pasado miércoles conmocionó a todos sus seguidores con una fotografía en la que recordaba que hace tan solo un año se encontraba ingresada en el hospital, debido al cáncer de estómago que sufrió.

Una enfermedad de la que, según ha contado ella misma, aún no ha recibido el alta definitiva, pero que se encuentra "muy bien, muy recuperada y tranquila". Y es que junto con la fotografía en la que recuerda su operación más complicada, Jara desvela que está "en manos de los mejores oncólogos". Por ese motivo, concluye la también diseñadora de joyas, "animo a todas las personas que estén malitas a qué no se rindan, que seguro salen adelante como yo salí".